Restaurante muy moderno, ya descrito en anteriores comentarios, las escaleras mecánicas no funcionaban, por lo que tuvimos que subir al primer piso a patita, menos mal que para ir a los servicios que estan en el sótano sí funcionaba el ascensor... carta de vinos bien surtida y,como en otros restaurantes de londres que visitamos, casi se olvidan de que en españa tambien hacemos vino,precios subiditos...pedimos surtidos de niguiris a unos 5€ la pieza de media(si, lo has leido bien, la pieza), vieiras en salsa de miso,lubina con ponzu hecha como una especie de carpaccio(lo mejor de la cena), roll de langostinos en tempura, roll de salmón, tempura variada y dos sopas, una de miso y una de miso rojo,todo correcto sin ser espectacular,(he disfrutado muchísimo mas en nobu). Pedimos vedilhan viognier a unos 25€(d lo mas baratito), muy rico, y terminamos con dos cócteles, el mio era un vaso llenísimo de hielo picado con lo equivalente a unos tres chupitos de líquido, a unos 12€, se me quedó un poco cara de tonto... en definitiva, si no te importa gastarte en una cena 80€, quieres ver un local y un ambiente "superfashion" y comer comida japonesa bien ejecutada, éste es tu restaurante...

La decoración es impresionante, con escaleras mecánicas para llegar al comedor y allí puedes elegir entre mesas convencionales o las típicas japonesas,en estas tienes que descalzarte pero tiene truco no te sientas como es tradicional, sino que debajo de la mesa hay un pequeño foso donde meter los pies.De los platos destacaría el sashimi de toro y el atún rojo con mayonesa de wasabi.Servicio de vino impecable,elegimos un sauvignon blanc a un precio bastante decente para estar en Londres.Por supuesto no hay mantel ni cubiertos,sólo los palillos.Carta de sakes extraordinaria y los cócteles,hay clásicos y japoneses,los preparan muy bien.No dejéis de visitar los servicios a los que se accede en ascensor.
Si vais mirad las ofertas en www.toptable.com yo pillé un descuento del 40%.De lo más cool de Londres en este momento.

Nuevo restaurante de Alan Yau (creador de la cadena Wagamama, con bastantes locales en Londres y del restaurante Hakkasan), reformado por el arquitecto japonés Kengo Kuma (lo leí en una revista que había en el hall). La barra de sushi está separada del restorán, de hecho tiene entrada propia. Rollito muy cool (gorila en la puerta, escaleras mecánicas para subir y ascensor para bajar al baño, por cierto muy bonito). El local con decoración espectacular basada en bambú y juegos de luces no puede dejar indiferente. Vestuario extrañísimo de los, por otra parte, muy serviciales camareros. La comida, estupenda: los noodles, el sushi, los nigiris, el sashimi, la tempura, el pollo para compartir, los postres... Carta interminable de sakes, mejor dejarse aconsejar. Controlándose, unos 40 euros por persona. Irreprochable. Local de moda, mejor llamar para reservar.