Es un local pequeño, podría ser un antiguo bar de pueblo, donde ofrecen comida japonesa preparada con celeridad y calidad a un precio razonable.
entorno ruidoso y servició ágil que esta a camino entre un bar de menú y un fast food con lo que las charlas posteriores son realmente imposibles.
las mesas son pequeñas, el espacio reducido, la atención juvenil y cercana, los precios en consonancia a todo esto.
lo mismo en otro lugar y con algo más de misticismo nos cuesta (por experiencia personal) un 30% más.
la carta de vinos no existe, pero los dados de atun, salmón, el yokitori de pollo, el hot philadelphia roll están de vicio....
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.