Fuimos el viernes a celebrar mi cumple mi pareja y yo. La verdad es que acudimos motivados por las buenas críticas de los internautas veremeros y salimos igual de contentos que ellos.
No voy a contar nada que no se haya dicho antes, el local muy moderno (nos sentamos en la zona de tapas, el restaurante es nuestra próxima parada) y el servicio muy amable. Abrimos con dos copas de hermanos lurton y sendos pinchos. Después Bravas (sencillo pero para mi gusto muy creativo), Ajoarriero (lo más flojo, le falta un poco más de textura), Hamburguesas de sepia (muy ricas y originales), Calamar con Ajetes (riquísimo) y paté de perdiz (recomendable). El vino, museum, nos antojamos de cigales.
Nos impresionó hasta no decir basta la poca farda que le ponen a vino y su extensísima carta. Aunque no fue nuestro caso, esto te permite disfrutar de referencias que para qué contar en otros locales. Referencia también al económico (y digno) servicio de pan a 0,50. Los cafés también comedidos, 1,20.
De postre optamos por el Volcán de chocolate y dos copas de Nadal Rosado.
Sencillamente disfrutamos.
Por cierto, en una esquina de la calle tenemos un bar-restaurante donde se puede hacer tiempo en la terraza tomando alguna cervecita y ciertas referencias de vino por copas a precios comedidos. En la otra esquina tenemos un pub donde hacen unos gin-tonics riquísimos. Valga esto último como comentario.