Cena para dos....menú de 40e. sin bebidas.
De entrantes:
-Tartar de atún-correcto-
-Ensalada de pulpo a la mayonesa de pimentón.Unas cuantas hojas verdes "pochas" acompañan a cinco pedacitos de pulpo.Mal.
De segundos:
-Cordero con curry rojo y cuscús.No gustó,insípido,muy flojo.
-Solomillo de ternera al Oporto.Correcto.
De postre,tomamos una espuma de naranja con coco,y un pastel de cerezas con helado de vainilla.Correctos.
La carta de vinos es decepcionante-ver web-a precios elevados.Al preguntar si tenían la opción por copas,me ofrecieron como única posibilidad Hoya de Cadenas.Con todo mi respeto,no creo que sea una opcíón acorde con lo que se pretende que sea tal lugar.Al final encontraron cuatro dedos de vino que les quedaba en alguna botella,un vino de Moixent-creo que se llama 16....uff!-,Realmente no existe servicio de vino,nii nadie que asesore o lo intente.
El sevicio voluntarioso,nada más.
No lo recomendaría a un amigo!!

El local es bonito, con buena separación entre mesas y unas vistas muy agradables.
Tiene una buena bodega, pero como sólo yo tomé vino no puedo juzgar la carta de vinos ni el servicio. Pedí que me indicaran que vino tenían por copas, sólo tenían un Aranleon y pese a que insistí me dijeron que no podían ofrecerme nada más por copas. La cristalería es correcta.

Lo más flojo, la comida. En todos los sitios sirven ya lo mismo. Se nota demasiado que a los restaurantes les sirven casi listo para servir: carrillera, cochinillo, solomillo y dos pescados. Esto es lo que tienen en muchísimos restaurantes, en todos sabe tood igual y sólo cambia la salsita con la que pintan el plato y la guarnición.

Por cierto, detalle terrible que mientras me tomaba el aperitivo (vermú) me sacaran una papas de bolsa, como las típicas Vicente Vidal. Estupendas en tu casa, pero no es lo que te esperas en un restaurante de más de 45€ por cabeza.

Sin embargo, si nos sirvieron una ensalada bastante buena, con verdura sabrosa. Un punto en ese sentido.

No repetiré. El hotel no está a la altura del precio en cuanto a servicio y habitaciones -en absoluto- y el restaurante, con una relación calidad precio más correcta, no me sorprendió en nada. Es correcto, se come a gusto, pero no se disfruta.

Restaurante perteneciente al hotel Mas de Canicattí. Estabamos solo nosotros comiendo por lo que la atención fué muy buena y el servicio del vino también.

La decoración del comedor de diseño moderno, con grandes cristaleras con vistas a los jardines exteriores. En la La terraza se estará muy bien.

Pedimos de entrantes una ensalada con mollejas de pato y un tartar de atún. No se pasaban.

Como plato principal un rosejat de fideua, bien.

La carta de vinos muy corta y muy cara. Una lástima.

La comida correcta, pero solo eso.

En resumen un lugar con mucho potencial por sus instalaciones pero que se quedan cortos en la comida, vinos, etc.

Local, ambiente (incluidad terraza), puesta en escena de tipo diseño cool, y muy comodo.
El servicio muy voluntarioso, aunque escaso, esa noche de caluroso agosto.
El menu degustacion muy satisfactorio en cantidad, presentacion y ritmo de servicio. La elaboracion correcta y con muy buen hacer.
No tomamos vino, por lo que no puedo calificar la bodega (magnifica instalacion a la vista)
Se noto el esfuerzo por parte del chef de agradadar y "conquistar".
Vale la pena desviarse de las ruta, sin lugar a dudas.

El restaurante Cadec está ubicado dentro del marco incomparable de la Relais&Chateaux Mas Canicattí ( impresionante finca de 52 hectareas de citricos ) . Restaurante con mucho diseño ( mucho hierro y cristal ) . Sala amplia , con muy buena separación entre mesas . Únicamente 3-4 mesas ocupadas . Servicio poco atento ( a pesar de la poca afluencia ) .
Cocina creativa , empezamos con dos entrantes : bombones dorados de foie ( muy elaborados ) y sepionet ( prácticamente deconstruido , a finas tiras ) . Como platos principales secreto de cerdo ibérico y bacalao asado , ambos buenos . Para beber , Champagne Laurent-Perrier Brut ( bueno , excesivamente caro ) . Para postre , coral de chocolate . Culminamos cena con gin-tonic de Bombay .
RCP excesivamente alta ( culpa del Champagne ) .

Lo mejor de este restaurante es su ubicacion:marco incomparable entre naranjos.
lo peor el servicio, falta profesionalidad, lentitud, poca atencion.
aparte de su localizacion le salva la calidad de los productos de sus platos que no su cantidad, que es poquisima.
muy caro, demasiado.
un detalle, excelente café

Restaurante perteneciente al hotel Mas de Canicattí que ofrece una cocina ligera y mediterránea con toques creativos.
Moderno comedor con una buena distancia entre mesas y con vistas a los jardines exteriores.
Nada que destacar en la comida, simplemente correcta, con poca variedad y repetición de productos y guarniciones, y con un acabado de los platos no siempre conseguido. Buena selección de panes y aceites (esto último, a veces te lo ofrecen y otras veces no).
Correcta carta de vinos, pero a unos precios elevados, buenas copas y servicio.
Respecto al servicio de sala, lento, desganado y antipático, al menos en lo que se refiere al camarero que nos toco a nosotros y que tuvimos la desgracia de ’sufrirlo’ los dos días que fuimos a cenar.
Puede ser una opcion mínimamente interesante si se está alojado en el hotel y pidiendo el menú corto (35€). No me arriesgaría en el resto de opciones.

Hoy en dia uno de los restaurantes mas bonitos de valencia,con un marco inconparable rodeado de naranjos tranmitiendo una absoluta tranquilidad,situado en el hotel "Mas de Canicatti Relais & Chateaux".
buena oferta gastronomica calidad-precio.bodega equilibrada y mejorable carro de quesos con un buen servicio de sala.
lugar recomendable.

Bonito restaurante, en un buen entorno y gran variedad y calidad de vinos.
La comida decepcionante, por la poquísima variedad, la baja calidad y el precio tan elevado. No recomendable.