Muy recomendable

Tuvimos la suerte de poder participar en una cata vertical de Nelín y clos Mogador en este fabuloso restaurante.
Se trata de un restaurante familiar, donde se han unido dos generaciones para elaborar platos con una mezcla de tradición – modernidad – cocina de autor – cocina mediterránea, cocina excelente y con una base de ingredientes autóctonos como la cereza de Sant Climent, un restaurante muy recomendable, tanto por la calidad, como por el servicio ambos exquisitos, con unos platos elaborados magníficos, y con una carta de vinos muy extensa y con unos precios muy ajustados, realmente una carta de 10.
Nos prepararon una serie de platos para acompañar los vinos, a cuál más sabroso. El Nelín 2009 y 2008 se maridó con una sopa fría de cerezas y colas de gamba, el 2007, 2005 y 2002 con un queso de cabra gratinado sobre fresitas, tomates y cerezas. Los Clos Mogador 2008 y 2007 se acompañaron por unos huevos estrellados con trufas, foie y pan crujiente, y las otras añadas, las 2006, 2002 y 1997 por un pollo de raza de pata azul de El Prat de Llobregat asado con almendras.
Esperamos volver a visitar el restaurante para disfrutar de su comida en una visita convencional.