En un viaje de fin semana a Granada y tras leer la buena y completa descripción de Latrufa sobre este restaurante nos atrevimos a probarlo, la verdad, todo un acierto. El sitio debió ser una antigua residencia de monjas ó monasterio, me hizo gracia que a la entrada hay una pila para agua bendita, en general el sitio muy bonito y acogedor.
De entrada trajeron una crema de calabaza que entraba muy bién, de primeros pedimos un plato de jamón iberico, bien, y las alcachofas salteadas con foie, espectaculares. Como segundos tomamos el bacalao y el taco de atun rojo, los dos con un punto de cocción perfecto. Para rematar un brownie de platano que estaba de muerte. Las raciones son abundantes, especialmente el postre.
Respecto al vino, la carta no es muy extensa aunque lo poco que tienen está bien. Nosotros pedimos un Emilio Moro que nunca falla, el precio un poco subido (x2 respecto a precio en tienda). Los gintonics normalitos y a 12 euros.
El servicio muy correcto y en general muy buena cena.
Pues la pila está en la pared de la derecha justo al entrar. Saludos desde Murcia y gracias por tu comentario, me hiciste quedar de cine en el cumple de mi mujer.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.