El local estaba casi vacío, ya que de momento poca gente sabe que el restaurante está abierto los domingos y ofrecen también este menú.
Dicho menú esta compuesto por 3 entrantes al centro, un arroz y un postre, además incluye una copa de vino y el café a 25€
Comimos una crema de patata y ajo con huevo a baja temperatura y pulpo; un tartar de aguacate, foie y salmón y unos muslitos de codorniz con escalibada. Los estrantes muy bien resueltos, pero sin llegar a deslumbrar. Tampoco es el objetivo de este menú.
Muy bueno el arroz de sepia con esparragos y también el postre de chocolate en texturas, aunque he comido decenas de postres parecidos a este.
El servicio del vino a cargo de Janeth, excelente, demostrando lo gran profesional que es.
A destacar también el servicio de hasta 6 variedades de pan con los ya famosos aceites de sabores y el carro de infusiones con una preparación que incluye incluso un cronómetro para controlar el tiempo.
No hay cambio de plato, ni de cubiertos entre las entradas, por lo que tuvimos que servirnos el tercer entrante con los platos manchados.
Ojo, el menú incluye el café (no especifica que es café solo), por lo que no incluye ni el cortado, ni las infusiones, cosa que no acabé de entender.