Un buen lugar para probar lo autóctono

Sin lugar a dudas un lugar para saborear lo más auténtico de la Marina Alta. En un entorno de bodega del siglo pasado, en una zona peatonal de moda incipiente para el tapeo -iniciado precisamente por Miguel Juan Tapes i Vins desde su relanzamiento-. Polpet sec, mitjerons, eriçonc (de Lonja), gamba amd bledes,... y unos arroces melosos a mediodia dignos del mejor alicantino. Fessols i naps; De gamba de Denia; De conejo y caracoles... En cuanto a los vinos, buena variedad a un precio acorde con el entorno (no es un restaurante de mantel de tela, pero la cristaleria es fina, las botellas refrigeradas y hay ganas de gustar por quien lo ofrece -Juan Luis-). Acabar con un Gin-Tonic de Fever Tree con, por ejemplo, Gin Bulldog, con "escanciado al estilo de la casa" puede ser una buena manera de "poner la guinda". Precios algo altos pero acordes con la calidad de la materia que se sirve.