Sin fallos imperdonables, pero sin grandes aciertos.
Llevaba bastante tiempo queriendo volver al Asador de Aranda, y una celebración familiar nos proporcionó la excusa perfecta.
El local y el servicio, bonito a grosso modo, pero que se ha quedado un poco rancio y desfasado, tanto en decoración, como en maneras (hacía tiempo que no veía a la carta el montaje de la mesa, con dos juegos de cubiertos, al más puro estilo banquete), y en cuanto al servicio, muy cercano (mucho), rozando la poco profesionalidad, y más próximo a la eventualidad que ofrecen muchos servicios de catering, porque ese trato cercano es un arma de doble filo, si el camarero ha tenido una buena noche, te sientes a gusto, pero como no sea así, te puede joder una celebración, y en según que sitios, y con según que facturas, no debería ser así.
En cuanto a lo meramente culinario, la carta muy básica, pero es lo que se espera, por ese camino, sin sorpresas. Aunque sí que en resultado ya no tan satisfactorio, pochas decentes, revuelto de setas (de las súper) que ni fu ni fa, y chorizo de olla bien, sin más. En cuanto al lechazo, que es a lo que se va, muy bien, lechazo churro (que es dificil de encontrar en la tierra del ternasco, y yo personalmente agradezco poder difrutar de alternativas) jugoso, sabroso, tierno, lo que se le debe pedir a todo buen asado ....a al estilo castellano. Otra cosa es que personalmente prefiera como se hace por aquí, sin agua y con patatas, pero igualmente sabía a lo que iba. Resumiendo, entrantes mediocres, segundos caros.
En cuanto a la carta de vinos, ¿correcta? para un establecimiento así, y con algunos precios desfasados, que proporcionan alguna "ganga" en la carta (Dominio de Longaz 12 €, cuando en tienda está en 12-14), y servido de esas manera.
Total de 5 personas con postres, 2 botella de vino, cafés, y 1 copa: 200 €. Pero si tenemos en cuenta que pedimos sólo 3 entrantes y lechazo para 4, la RCP disminuye considerablemente, eso sí, al ser uno de ellos una persona de cierta edad y poco apetito, la raciones fueron más que suficientes. Regular en lineas generales, pero es la única forma de comer lechazo churro, por estos lares.
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Lo cierto es que no soy un gran entendido, pero las veces que he podido degustar dicha raza, me ha parecido muchísimo más gustosa que el Ternasco DO de Aragón (creo que la variedad es Rasa Aragonesa), y no es que me parezca malo, o mejor el churro, pero como no lo podemos degustar con tanta frecuencia como en Castilla y León, pues cada vez que tengo oportunidad aprovecho para disfrutarlo.
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Buena crítica amigo. Te haces una idea muy clara de lo que puedes esperar del restaurante. ¿Había mucha gente?. ¿qué tal está valorado en la ciudad?.
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Hola, Lair, pregunté a mi amigo entendido en carnes de cordero. Así aprendemos algo. En su opinión el cordero churro tiene más carne pero ésta es más vasta o jasca, también puede encontrarse en la comarca de Calatayud aunque quizás sea más típico en Castilla. En su opinión es mejor la Rasa Aragonesa, aunque quizás la mejor variedad sea la Roya Bilbilitana que por ejemplo cria un amigo mío del pueblo, doy fé que ese cordero esta buenisimo.
Aunque pa gustos, los colores. Un saludo. -
Estimado Nacho, lo cierto es que el restaurante estaba hasta los mismísimos topes, y de hecho en las 2 ocasiones que he estado, no cabía ni un alfiler, ¿su valoración?, yo diría que bien, más populista que de la opinión más especializada.
@Latrufa. Pues es probable que sí que sea una carne más jasca, pero al haberla probado asada siempre al estilo castellano, pues supongo que las diferencias se diluyen un poco.
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Yo soy maño y ejerzo de, me encanta el Ternasco de Aragón, pero, y me fastidia decirlo, me gusta todavía más el Lechazo castellano. No se si es el modo de cocinarlo (horno refractario), o la carne pero el resultado es excepcional.
De todos modos el Lechazo es el corderito lechal, que solo ha comido leche, y el Ternasco (creo) ya ha sido destetado (a nos ser que sea Ternasco lechal, que es con el que habría que compararlo).
Saludos