Elegante.

Local elegante y moderno, situado en el Hotel Arts. Amplio, cómodo, al nivel del Hotel. Servicio muy profesional y correcto, aunque todos extranjeros, incluso me hablaron varias veces en inglés, pero por supuesto nadie me hablaba en catalán, y apenas me entendían. No tengo nada contra los extranjeros, pero quizá el restaurante tiene algo contra los autóctonos???. Me aparcaron el coche, no me cobraron la copa de cava de aperitivo. Comenzamos con 3 pequeños aperitivos muy buenos. Los platos, excelentes. Un originalísimo consomé con varias delicias, las cigales con ceps, el canetón de pato donde sólo el foie no estaba a mi gusto, y una deliciosa lubina. Postres buenos, pero sin brillar. Las copas Schott mejorables, ya que por estos precios quiero copas Riedel. La carta de vinos, variada, pero con un defecto para mi: Ningún vino por debajo de 30 euros, y sólo 3 ó 4 por debajo de 40. Por tanto. vinos excesivamente caros en general. Café correcto y buenos petit fours. Pan de 2 clases, muy rico. Precio: unos 80 euros por persona, vino aparte. Creo que Paco Pérez debería mejorar algunos aspectos que no están a la altura de su cocina.