Fui con unos amigos y desde la comanda nos sentimos chantajeado para pedir la comida a su gusto. No le dimos importancia pero la comida vino tarde, escasa, con pelos y con malas caras todo el rato. Consiguieron estropear un buen día. No vayáis mucha rabia y camareros hastiados de su trabajo que revierten con prepotencia en los clientes forasteros.
Comida para 7 después de visitar los bonitos lagos de Quesa.
Local agradable con decoración, menaje, cubertería y crsitalería sobria pero funcional.
Pedimos para picar patatas bravas, jamón y queso y ensalada de la casa, platos correctos con raciones generosas y económicas. Todo correcto.
Lo bueno vino con el plato principal, gazpacho para 2 y arroz al horno para 5.
Contundencia, sabor, producto, ambos platos geniales muy buenos, hechos al horno de leña, bien acompañados de buen pan y que sobró y nos sorprendieron sacándonoslo para llevar en fiambreras.
Lo mejor el precio de los platos, cada plato de arroz o gazpacho 6.50 €, y encima lo bueno que está y la generosidad de las raciones, el precio es de risa.
De beber cervezas y refrescos y 1 botella Castillo Enguera reserva .
Carta de vinos decente con referencias valencianas sobre todo, sin olvidar de los clásico rioja y ribera. Copas correctas, servicio del vino consistente en descorche.
De postre solo llegamos 2, 1 coulan de chocolate y 1 flan de café , ambos postres caseros muy ricos.
+ 2 cafés.
Trato rápido, amable, cercano y servicial.
Muy recomendable.
El Bar La Parra está en el centro de Quesa. Es el mejor sitio para comer después de visitar el Macizo del Caroig por esa parte (pinturas rupestres, huellas de dinosaurios, barrancos, los charcos)
Se pueden degustar los platos más característicos de la zona, elaborados todos ellos al más puro estilo tradicional y artesanal.
El gazpacho manchego es el plato por excelencia. La elaboración del gazpacho es un arte que se ha heredado generación tras generación. En el Bar La Parra se conserva intacta esta tradición. La preparación de este plato es difícil y costosa, desde el amasado de la torta, hasta el punto de las brasas que la cocerán, desde la cantidad de agua al desmenuzado de la torta. Hay que tener en cuenta todos los detalles para poder degustar un buen gazpacho.
El arroz al horno es otro plato típico, con sus carnes de conejo, cerdo y pollo, sus garbanzos y morcilla. Cocido en horno de leña para acentuar aún más todo su valor gastronómico.
Los postres caseros también están bien
El restaurante cuenta con 10 mesas y un total de 50 plazas.
Tiene una carta de vinos valencianos bastante buena