Para mi... siempre es un acierto!

Hace un año que descubrí este restaurante japonés en una reunión de trabajo. Ahora es nuestra cita obligada para amenizar nuestras reuniones de negocios y como no, para cerrar más de un contrato importante. Ya somos asiduos, por así decirlo.

Casi siempre optamos por el menú degustación, haciendo cambios según los platos nuevos que nos ofrecen.

Los últimos hallazgos, un tipo de carpaccio de salmonete con salsa de zumo de naranja y ponzu y los filetes de boquerón (crudo) a las tres salsas. Más fresco imposible y se agradece teniendo que trabajar en pleno julio.

Y cuando no es por una reunión y quiero comer rápido y bien, tienen un menú de mediodía, generoso en los platos y en la bebida.

El último día, recuerdo Sushi, secreto de cerdo ibérico con verduritas, sopa de miso y cumbre de chocolate y cerezas... Por 30 euros, incluyendo agua vino (no se si incluía el café).

Servicio: Atento, sin ostentaciones
Comida: Materia prima fresquísima y de calidad

La única reclamación sería que nos retiran de carta platos estrella, como la anguila con foie poele con aguacate en tempura, nos mantendremos pesados hasta que vuelvan a introducirlo.

Carta de vinos: Extensa y cuidada aunque siempre nos dejamos aconsejar por Guillem (director)

Precio: Me sorprende muchísimo el precio medio de la anterior crítica, el día que nos subió más (75 €) hicimos maridaje y finalizamos con copas de los mejores whiskys. Ahora que recuerdo... un día memorable!.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar