Siempre un acierto , no falla....

A ver si me pongo al día, que voy super retrasado, ahora es la ocasión, cuando no me puede la pereza, claro.
Siempre en un placer venir a casa de Nacho y su familia, esta vez convencí a unos amigos que no conocían el local.
Primero un vermut en la barra del bar, que es una costumbre adquirida.
Nos acercamos al restaurante y empieza el festival, 75€, no incluye el pan, ni la bebida, decir que nos dejaron llevar un par de botellas de vino, y luego pedimos de la carta de vinos, éramos cuatro.
Empezamos con unos filipinos de foie, recubiertos de chocolate blanco y con sal maldon, muy ricos, no hay que dejar que se calienten.
Una tosta con gelatina de tomate, anchoa, dos puntos de mouse de albahaca y otros dos puntos de queso de la tierra, en espuma, que bueno, el tomate mucho sabor, original, te lo presentan como bocadillo de tomate….
La croqueta, con la que gano el concurso del 2017, cojonuda.
Buñuelo de compango, rico, yo quizás lo pondría antes de la croqueta, pero es un decir.
Rica alcachofa de temporada, confitada, luego plancha y sal, me encanta la buena alcachofa.
Ostra con gazpachuelo cántabro, el gazpachuelo con una base de verdura y el jugo de la ostra, otra manera distinta de comer ostra, rico.
Ensalada de bogavante, en tartar y con una espuma de cabezas del propio bogavante, y una hoja de hierba del roció, a nivel, muy rico.
Ensalada de bocarte en texturas, tomate, caviar nacarii, bocarte marinado, helado de anchoas y crujiente de espinas, a modo de pan, para acompañar, muy rico, todos los platos, de siempre cuidan mucho que el sabor, prevalezca por encima de las técnicas modernas, aun estando presentes.
Cocido montañés, versión actualizada, como he comentado, técnica para la vista, pero sabor para el gusto, una base de crema de berza, la alubia, crema de morcilla, tocino y sal de chorizo, y lo completan con un caldo del propio cocido, sabrosoooooo.
Yema campera del Ason (será el pueblo) carbonara verde, setas, trufa, remolacha y queso, de puta madre, no encuentro una definición más descriptiva.
Ternera, con bearnesa y clorofila, te recomiendan mezclar la clorofila con la salsa, diferente, la ternera mantequilla.
Guiso de callos de bacalao con carabinero, la cabeza aparte, y en el guiso el crujiente lo aporta la piel del bacalao, un plato gustoso, en todo su conjunto.
Merluza de anzuelo asada a la sal, decir que la merluza aquí la elaboran de diez u más, si además lo acompañas de una mantequilla blanca (beurre-blanc), algas, hierba del rocio verdolaga marinada, de diez.
Pedimos, culpa mía, un steak tartar, lo hacen de lujo, un poco para cada uno, te lo hacen en el momento y a la vista, 30€, bien gastados.
Postres, infusión de fresas, sorbete de tomate y crujiente de frutos rojos, muy refrescante.
Viaje a Tailandia, mix de especias, curry verde, jengibre galanga, citronela cúrcuma, cilantro, lima, trozos de mango, helado de yogurt y crujiente de merengue, y se completa con una crema de fruta (mango, papaya, coco), distinto, no te deja indiferente, molo.
Acabamos con unos petit fours , como siempre , gominolas caseras , sobaditos , y almendrados .
Para beber además de lo llevado , no nos cobraron descorche por las dos botellas , tomamos un espumoso que me gusta mucho , lo hace un vasco en Cantabria , por lo que es Cántabro , Maldita la hora , 28€ , “acinipo”Lemberguer (F.Shactz , 25€ , el pan 3,5€ por cinco , aunque éramos cuatro , pero si te pasas comiendo , te cobran , eso si , el pan de lujo.
Dado el precio del menú , no vamos a discutir por el pan , faltaría mas , un gin de Siderit , 8,5€ , cafes a 2,5€ , total 423€ , entre cuatro , comiendo de lujo y con dos botellas de vino , 105€ por barba , de lujo .