Decepción

Coincido con algún comentario previo, estuve el pasado verano. Mi primera sorpresa fue ver que no hay carta, solo los ya mencionado dos menús degustación. A tragar y a comer uno de ellos. Yo tuve suerte y el Santa Rosa si lo tenían ese día.
El trato frío y con apariencia de querer largarse a casa a descansar. La comida nada del otro mundo, incluso me dio la impresión de estar en un catering, como si hubiesen subido hasta allí la comida y en cocina calentar y listo.
Al terminar el postre me quedan dos copas de vino y le pregunto a la camarera amablemente si podría ponerme un poco de queso para rematarlo, son las 16:30, y me dice que lo siente pero el cocinero ya ha marchado, a lo que yo, en plan guasa porque ya empezaba a no agradarme el trato, le conteste que si había cerrado con llave la nevera y me dijo que así era.
Lo mejor las vistas, en eso estoy de acuerdo. Pero pese a que uno suba en coche, como no sea alguna autoridad política a la que seguro dejan en la misma puerta, debe andar un trecho que además no está asfaltado. Y en el cálido y seco verano alicantino, allá que vamos mi señora y yo bien vestidos (la señora con sus tacones y esas cosas) por un camino polvoriento y lleno de tierra cuando nos cruzamos con un vehículo municipal que baja a una velocidad suficiente como para que accediéramos al restaurante con el polvo hasta en las cejas.
No pienso volver a menos que todo lo dicho cambie.

Recomendado por 1 usuario

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar