Parada imprevista para comer en viaje de trabajo. Menú del día bastante interesante, bien cuidado, ración generosa, a un precio razonable, además abre los lunes, que también es a tener en cuenta. Propuesta variada en el mismo, con varios platos realmente atractivos, yo me decanté por el salteado de pasta fresca con bacalao desmigado y salsav de azafrán, que aunque yo me esperaba otra cosa (pasta en tira en lugar de una especie de macarrón, y más seco en cuanto a la salsa) estaba razonablemente bueno, y de segundo albóndigas de cordero con sepia y salsa de almendras, excelentes, realmente deliciosas y ligeras, muy bien presentado el plato, con un puré de patata (casi espuma), la salsa alrededor, y decorado con láminas de plátano crujientes que servían de acompañamiento. De postre una sopa de chocolate blanco con espuma de frutos rojos, también muy buena. Como digo, muy recomendable la opción, de ahí que me anime a incluirla. 20 € IVA incluído (que no incluyo en el apartado para no devirtuar el precio medio), acompañado de un Viñas del Vero joven, razonable. No pude ojear carta de vinos así que me abstengo de valorar el apartado. Además las nota de la comida y la RCP son relativizadas a dicho menú. Servicio amable y eficiente, pude seguir camino sin apenas retraso, decoración y situación si nos atenemos a que es común con la carta, normalilla.
Menús del día que hacen plantearte repetir pero a la carta, no como en otros casos...