Restaurante agradable y tranquilo, con decoración sobria y 6 ó 7 mesas. El

Restaurante agradable y tranquilo, con decoración sobria y 6 ó 7 mesas. El servicio es muy profesional, correcto y atento. Copas adecuadas (sin marca). Carta de vinos adecuada, no muy extensa, con predominio de vinos catalanes. Panecillos de 3 clases, muy buenos. Aperitivos también correctos. La comida está a muy buen nivel: buen producto, buena presentación, cocción adecuada. Comimos ensalada de langostinos ahumados, huevos fritos con foie y couscous de kikos, bacalao confitado y el pescado del día, que era un excelente rodaballo acompañado con verduritas. Todos los platos tienen su "gracia" y destacan por algo; nada nos pareció superfluo, todo bien pensado y equilibrado. Además, todo maridó excelentemente con un "Orcella Ardea". Los postres, un "mel y mató" excelente y un "tiramisú de chocolate blanco" excepcional. Café correcto, sin acompañamientos. Muy buen nivel, para repetir. Precio: unos 35-40 euros por persona, sin el vino.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar