Interesante Restaurante próximo a la estación de metro de Godella. Buena ubicación. Restaurante especializado en arroces y en foie. Intesante carta tanto de comida como de vino. Correcta vajilla, manteleria y cuberteria. A mejorar la cristaleria. Comimos un pastel de calabacin y otro de morcilla ambos bastante aceptables, proseguimos con escalopines de foie el PX el cual sin despreciarlo no nos acabo de convencer ni la elaboración ni la textura del mismo. Tomamos unas cigalas (bien), rodaballo (correcto sin mas), y costillas de lechal (poca cantidad y sin apenas "chicha). Postres y cafés. Bebimos una botella de Juve & Camps 1/2. Muy aceptable RCP (100 €). Buen trato al cliente. Tuvieron la gentileza de enseñarnos la coqueta bodega de la cual disponen. En resumen, un lugar interesante especialmente indicado para comer un buen arroz los cuales por lo que vimos tenian variedad y una pinta estupenda.
http://www.restaurantecastillo.es/
Un saludo.
Hacia tiempo que no visitaba este restaurante (antes lo hacia bastante frecuentemente). Nos gustó mucho la remodelación que da sensación de amplitud y al mismo tiempo tranquilidad. La carta esta muy mejorada respecto a lo que recordaba con propuestas fuera de carta también muy interesantes. Éramos 5 pax (+ 1 niño, que tomo un plato). Tomamos 3 entrantes: escalopines de foie al PX (extraordinario sabor y textura), ensalada tibia de laminas de bacalao, buena, y unas cigalas abiertas a la plancha, SUBLIMES. De platos, 2 lubina salvaje sobre lecho de verduras (perfecto punto de cocción y sabor), 1 lomo de bacalao gratinado con muselina de ajo y 2 sugerentes guisos de rabo de toro con caracoles, muy bueno. 3 postres + cafés, aguas y Condado de Haza crianza 2004. Total 190 € (a menos de 40 € por persona, es decir, muy buena RCP). El servicio de sala muy atento pero sin agobiar. El vino servido a la temperatura correcta aunque, eso sí, las copas muy mejorables. Tuvieron detalles como invitarnos a licores que elaboran ellos y posteriormente a 1 botella de cava. Para repetir sin duda.
Es un restaurante con experiencia de diez años que recientemente ha sido reformado y redecorado con muy buen gusto. Posee una bodega amplia y aclimatada con buenos caldos. Su cocina es valenciana creativa y quiero hacer mención a los arroces, especialmente los marineros. De los platos que más me ha sorprendido es el "magret de pato" y "rabo de toro con caracoles". Excelente atención por el servicio de camareros con experiencia que hacen más agradable, si cabe, la estancia.
Coincido en la carta algo escasa,mas si le haces alguna visita seguida,pero a pesar de ello,buena cocina y trato amable,a mi juicio falla en el vino,algo escaso y sobre todo caro.
Creo que no corresponde la calidad con el precio.
Desde luego donde mas discrepo es en que sea uno de los mejores de la zona,a mi juicio no llega ni por asomo a la calidad y variedad de la Tinença.
Se ha reformado la parte posterior del local, y se ha añadido una bodega-sala de catas. Lo cual mejora considerablemente el local en su conjunto.
Continúa con su línea habitual de buen producto y mejor elaboración, además de excelente trato en la sala (muy buenos camareros Paco&Paco). Se debería mejorar, como apunta Raquel, el tamaño de las raciones: muy justas.
La carta, un simple A3 plegado y plastificado, desmerece un tanto el nivel del local, aunque ofrecen un gran número de opciones fuera de carta, custa poco imprimir una hoja con las recomendaciones del día (y sus precios).
Uno de los mejores de la zona Godella-Rocafort.
Preferiría que tuviera una zona para no fumadores. La calidad de los platos es buena, el postre lo mejor: el souflé de chocolate, ya que provienen de una familia de pasteleros de varias generaciones. La carta se hace un poco corta tras varias visitas, buenos arroces y buenas carnes y pescados. Raciones muy cortas pero bien elaboradas. Precios de 35 a 40 €.