Restaurante Pago del Vicario en Ciudad Real
Restaurante Pago del Vicario
País:
España
Provincia:
Localidad:
Cód. Postal:
Tipo de cocina:

Añadir vino por copa

Precio desde:
45,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Cierra:
no
Nota de cata PRECIO MEDIO:
50 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
7.3
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
7.2
Comida COMIDA
7.0
Precio medio entorno ENTORNO
8.2
RCP CALIDAD-PRECIO
6.0
Opiniones de Pago del Vicario
OPINIONES
14

Nuestra visita a este restaurante ha resultado una agradable experiencia, cumpliéndose las expectativas creadas a raíz de los comentarios precedentes. El local es de líneas vanguardistas, con ventanales de formato panorámico, buena separación entre mesas y cubertería de nivel. El trato al cliente es algo distante y frío, pero muy profesional. Ofrecen una cocina regional actualizada, sin que falten tampoco propuestas de autor. Pedimos el menú desgustación maridado, que por 51€ incluye 5 platos, varios vinos y café. El menú consistió en lo siguiente:
- Crema de bogavante con langostinos: muy agradable, siendo acompañado de Talva 2007, un blanco de chardonnay y sauvignon blanc, que no nos convenció.
- Brick de queso Villadiego: estaba muy bueno, al igual que el vino ofrecido en esta ocasión, un inusual, sorprendente y agradable rosado de Petit verdot 2010
- Merluza en salsa marinera: pescado en su punto, pero la salsa no me parece la más adecuada para este pescado, al igual que el vino, que se trataba del mismo rosado de antes.
- Solomillo de ibérico: lo mejor de la comida, rico y en su punto. El vino también a la altura: Pago del Vicario 50x50 2007.
- No recuerdo el postre, pero si su compañía, Pago del Vicario Corte dulce 2007, que maridó prefectamente.
Para tenerlo en cuenta si volvemos por la zona

Una noche helada, la bodega llena porque comenzaban con los preparativos de los banquetes de boda. Cenamos en el habitáculo preparado para fumadores.

Cena para dos con este menú recomendado por la propia bodega.

- Tostadita de foie caramelizada con almibar de vino blanco.
Rollito de salmón ahumado noruego y crema de mostaza semidulce.
Servido con Corte Dulce. Bien, y el vino muy acertado.

- Suprema de merluza al horno con verduras salteadas y puré de brócoli.
Servido con el Blanco de Tempranillo. Muy sabroso y tierno el pescado y bien el tempranillo.

- Solomillo de ternera con crema de mandioca y ajos tiernos.
Servido con el Men de Mencía. Muy bien también la carne. El mencía hubo que darle un momento para que se abriera un poco.

- Rectángulo de tres chocolates con fresas y coulis de frutos rojos.
Servido con el Merlot Dulce. Interesante combinación, aunque creo que a este vino dulce le sigue faltando mejorar un poco para acercarse a otros.

Un café y una copa.

Este menú nos ha gustado bastante más que el de la última vez, la materia prima nos ha parecido de mayor calidad.

Con el menú obsequiaban con una botellita de Monagos de 2005, que el día siguiente dimos cuenta de ella.

Gran entorno con el Guadiana como gran invitado. El restaurante espacioso y con vistas increibles, los ventanales desde donde ves la viña a la misma altura que estás comiendo, el parque de barricas,...
Nos ofrecieron un menú que constaba de dos aperitivos, tres platos y postre. A corregir algún error, los dos aperitivos incluian gamba y luego el plato de pescado (bacalao) iba cargado con excesivas salsas que enmascaraban el producto. El ciervo rico y jugoso. Quizás pensabamos que todo el menú iba a estar compuesto por productos de la zona. De sus vinos me gusta Monagos y Agios con bastante botella, sin embargo en el menú los vinos fueron el Blanco Tempranillo (mejor la primera añada, en esta última le han dejado un poco de azúcar residual para ser más facilón y para mi gusto a perdido su encanto, lo mismo ocurre con el rosado Petit Verdot) el rosado y Penta (poco expresivo), así que decidimos pedir nosotros los vinos aparte. Estoy de acuerdo con un comentario anterior sobre el Merlot dulce excesiva dureza de sus taninos que lo hacen un poco desagradable. Sobre otro comentario de elaborar un espumoso creo que es una locura me remito a las pruebas del resto de espumosos de la región, está es un región de tintos y algún blanco peculiar (que no pida mucha acidez y frescura en su elaboración) dependiendo de la zona, los espumosos elaborados mediante el método tradicional necesitan uvas ricas en acidez y con poco grado, justo todo lo contrario de la zona).
Si teneis oportunidad probar el vino del Club, otra historia.
En la línea de vinos concentrados, potentes, golosos,..., Susana se mueve como pez en el agua.
A destacar la finca Villadiego donde elaboran su queso con ovejas manchegas en una de las queserías más antiguas de la Península.

Si la gastronomia de esta ciudad siguiese el camino de este restaurante otro gallo cantaria , gastos en infraestructura aparte , este restaurante , comodo , elegante , y bien atendido , supone un aliciente para cualquier visitante de la ciudad , cocina equilibrada , buena materia prima y elaboraciones de interes . Pasta brie , rellena con queso manchego , bacalao , y avestruz , amen de la leche frita suponen un aliciente para cualquier comensal , buenos vinos , todos los de la bodega , mas de tu agrado o menos , pero buenos vinos , incluido un godello , sobremesa sobresaliente , como tanto valoran otros y hotel de encanto , si la compañia esta a la altura.

Hemos pasado el fin de semana en esta bodega-hotel de Ciudad Real quedando bastante satisfechos de la visita.
En cuanto al restaurante, destacar el comedor, amplio, moderno (sin estridencias)y atractivo (ventanal a la sala de barricas). En cuanto al servicio bastante correcto y voluntarioso (algunos detalles como no darte a probar el vino se deben mejorar).
La cocina basada básicamente en productos de la tierra con un toque de modernidad y un producto de calidad. Destacar las gachas, el tiznao y algún postre. En definitiva bastante agradable y de lo mejor de la zona.
es un placer dar un paseo por la monumental finca con balcones al guadiana aunque las actividades fura del buen timepo se ven bastante limitadas.
Respecto a los vinos tienen un buen nivel medio, me ha sorprendido el merlot dulce que si son capaces de pulir esa (a mi entender) tanicidad excesiva puede ser un vino dulce de mucho nivel y de una calidad-precio envidiable.
En definitiva recomendable.

Me ratifico en mis dos anteriores comentarios. Propuesta interesante. Volvimos a elegir el menú largo. Quizá esta vez un poco por debajo. El pato de espárragos blancos servido con el talva no era el más apropiado para un menú de este tipo. Las albóndigas, la presa ibérica y el bacalao, bien. La tarta de manzana correcta. El camarero tuvo el buen detalle de ofrecerme probar su nuevo vino al preguntarle por él, Soto Del Vicario GO, (Godelló y Doña Blanca), el cual me gustó bastante, creo que mejor que el Blanco de Tempranillo y el Talva, más redondo. Al terminar compramos unas cuantas botellas. Les recomendé elaborar un cava propio, creo que con las posibilidades que allí tienen, podría ser una apuesta interesante. En definitiva, la idea, siendo buena, me resulta un tanto incompleta: mejorando un poco el menú degustación e incluyendo Agios, Monagos y Soto de Vicario GO en el menú (se supone que les interesaría dar a concocer sus mejores vinos), el restaurante ganaría nivel. En Cuidad Real eso si, sigue siendo una buena opción.

Segunda visita después de algo más de dos años a esta bodega-restaurante-hotel. Restaurante situado en la parte alta de la zona de barricas de la bodega, local magnífico, muy bonito. Servicio muy atento y simpático, con ganas de agradar. Coperio schott, buenos cubiertos, cambio de los mismos en cada uno de los platos. Optamos al igual que la otra vez por el menú largo degustación (48€), que incluye el maridaje con vinos de la propia bodega. Consistió en: crepes de ahumados con crema de patatas y puerros (muy buenos), taco de bonito confitado con tomate y albacaha (bien), bacalao asado con vizcaina ligera y tinta de calamar (aprobado), presa ibérica con manzana caramelizada (decepcionante), de postre tarta de chocolate (correcta). Mi sensación, en comparación con la primera vez, es de disminución de la creatividad y calidad de los productos. Simplemente correcto.

Disfrutamos enormemente de nuestra visita a Pago del Vicario, a la bodega y la finca, bordeada por el río Guadiana. Degustamos el menú corto. Las viandas se ofrecen maridadas con los vinos de la bodega: su blanco fermentado en barrica, su fantástico rosado y con el último plato el elegante 50/50; por lo que la valoración del servicio del vino es relativa: podrían mejorarla, ciertamente. El equipo de cocina, curtido en los fogones de Paradores, elaboran una interesante cocina moderna con aires manchegos, muy bien trabajada con productos bien escogidos. A destacar el excelente queso manchego elaborado en una finca cercana (a la venta en la propia bodega). El postre no es nada del otro mundo. El menú corto queda realmente corto; si vais escoged el más largo, que llenará un poco más. La moderna cocina española, tan criticada ahora por Santi Santamaría, haría bien en copiar las maneras de cocineros de otras latitudes (p.ej. EEUU) donde dan abundamentemente de comer... Regresaremos a estas tierras manchegas

Muy buen restaurante con un menú maridado con los vinos de la bodega. Interesante opción el poder dar un paseo por la bodega y probar los vinos y quesos que elaboran.

Desde luego si se está cerca vale la pena acercarse y pasar un interesante día como el que pasamos. Para más información y detalles con fotos.

http://vinsimes.blogspot.com/2008/04/bodega-y-restaurante-pago-del-vicario.html

Hemos vuelto a cenar en esta moderna bodega de Ciudad Real, disfrutando del maridaje de 5 de sus vinos con 5 platos: el carpaccio de langostinos acompañado del Petit Verdot Rosado, (vino que parece ser ha conseguido ser, según una de las más conocidas guías, el mejor rosado de España); los pimientos con salmón y caballa (una especie de tataki de salmón) con el tempranillo blanco; la ensalada de bacalao con el Penta; el cordero con guarnición de patata con el 50-50; y la tarta de chocolate con el Merlot dulce. Muy interesante probar diferentes platos y conocer los buenos vinos de esta bodega. Creo que la relación caliad precio es buena. (46 euros este menú). Servicio correcto y atento. Entorno de sala agradable y acogedora. Al terminar compramos algunos vinos. Sigo pensando que estaría bien incluir o el Monagos o el Agios en sus menús degustación. Muy recomendable.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar