Magnífico restaurante de corte familiar y de reducidas pero acertadas

Magnífico restaurante de corte familiar y de reducidas pero acertadas dimensiones. Casa Lucio (que nada tiene que ver con el de Madrid) ofrece desde hace 8 años calidad, buena elaboración y mucha, mucha honestidad en sus platos.
La carta cantada, sin prisas y con detalladas explicaciones "bajo demanda" con más de 7 primeros, 7 segundos y 3-4 postres, todo elaborado de manera casera y presentado magistralmente. Los vinos, sugeridos, con carta justa pero bien escogida, copas y temperatura correctas.
En mi caso ensalada de esqueixada de bacalao con minijudías, atún fresco a la plancha y un óvalo de chocolates junto con un Gran Caus Rosado hicieron las delicias del almuerzo. El postre lo acompañé de un Moscatel de Ochoa.
Salimos a 45 eur por persona (todo incluido) y con una gran satisfacción.
Ah! ofrecen pan y es de verdad :-D
(Para los amantes del Piratas, no dejar de visitar este también por ciertas similitudes)