Visita al restaurante del chef Sergi VIdal, chef catalán afincado en Burgos desde el año 2015, fecha en la que creó el restaurante Alma, situado en el limite norte del centro histórico de la ciudad, junto al museo militar. Esta recomendado por la guia Michelin.

Su cocina, de raíces tradicionales y de mercado, está elaborada con productos frescos de temporada, con una presentación puesta al día.

Fuimos a cenar, el 12 de agosto. Al llegar, y tras franquear su moderna fachada te encuentras, al entrar casi directamente frente a una gran sala de corte moderno, amplia y luminosa,  que me recordó por su distribución a un buen comedor de cafetería.  Muchas mesas rectangulares, de color blanco, correctamente separadas las unas de las otras, desnudas y con corre-manteles. La cocina, a la vista, está situada en la parte izquierda del comedor.

Nos situaron en una pequeña mesa para dos justo a la entrada del restaurante. El servicio de sala llevado a cabo por una sola persona fue correcto. El servicio del vino no puedo juzgarlo porque bebimos agua y cerveza, solo puedo decir que tienen una carta con un poco mas de 100 referencias. Esa noche, el restaurante no se llenó.

Proponen 2 menús degustación y una carta de temporada. Optamos por esta ultima.

Primeramente como aperitivo, nos ofrecieron unas tacitas de salmorejo. Buenas y refrescantes.

Como entrantes compartimos :

Cecina curada de León con Aceite de Oliva Virgen extra (1/2 ración). Muy buena.

Croquetas de gambas. Correctas

De segundo compartimos cada uno una ración de un pescado del día entero, cuyo peso no recuerdo :

Rape negro a la bilbaina con patatas.  El pescado, muy bueno, cocinado en su perfecto punto de cocción, pero las patatas estuvieron lejos de estar en su punto (muy poco hechas), una lastima.

El pan que tomamos fue bueno.

De postres optamos por :

Torrija de chocolate blanco, crema inglesa de cardamomo y sorbete de maracuyá

Otro concepto del Daikiri de mango.

Ambos postres nos gustaron.

Para beber tomamos una botella de agua mineral  grande y 2 botellines de cerveza 1906.

No tomamos cafés.

La cuenta ascendió a 49,95 €/persona.  RCP correcta. Buen producto, bien cocinado aunque con altos y bajos. Fue una pena, por ejemplo, que ese delicioso rape negro que tomamos, quedase enmascarado por unas patatas incomibles.