A tope y ... sálvese quien pueda

Nueva visita al restaurante Le Petit Jardin tras un año y dos meses de la precedente, en el primer día de apertura de las "terrazas" de restaurantes, el 19 de mayo de 2021, tras 8 meses de cierre por la dichosa pandemia. (Los restaurantes no abrirán totalmente hasta el 9 de junio y con restricciones).

No voy a describir nuevamente el restaurante y su cocina, si estáis interesados en conocerlo podéis leer mi comentario  precedente : (https://www.verema.com/restaurantes/144051-petit-jardin-montpellier/valoraciones/1512036-restaurante-encanto).

Fuimos al mediodía tras haber reservado con quince días de antelación. El restaurante, bueno mejor dicho el jardín, estaba lleno hasta los topes (solo quedaba una mesa libre). Nos situaron en una mesa al final del recinto desde la que se divisaban las torres de la Catedral de Montpellier (ver foto en el primer comentario). Menos mal que la vista era buena, porque la mesa era pequeña, muy pequeña y además hacia viento.

Decir desde luego que esta experiencia no tiene que ver nada con la anterior... Primer día de apertura y falta de rodaje en el servicio, que aunque bueno fue lento y desacompasado. Llegamos a las 13 h y salimos pasadas las 15 h para un menú sencillo (entrada, plato principal y postre).

Tanto los camareros como el sumiller hacían lo que podían pero estaban desbordados. Aun así, quiero destacar que el servicio del vino fue muy bueno.

Las mesas estaban bien vestidas, con manteles, buenos cubiertos y vajilla Villeroy &Boch. Las copas aunque correctas, siguen sin estar a la altura que se merecerían. Han habido cambios a nivel de la cocina, hay un nuevo Chef, Clément Gueudré, pero la primera impresión es que sigue en la misma línea que el anterior, cocina mediterránea, del Languedoc, de producto y de mercado con un toque de audacia y de creatividad. Me permito recordar que tienen un plato Michelin y está recomendado por la guía Gault&Millau.

Proponen la carta y dos menús degustación, uno de temporada a 41 € y el menú Petit Jardin a 57 €. Optamos por este ultimo, que estaba compuesto por tres entrantes,  tres platos principales y la carta de quesos y postres con 7 opciones, a escoger un plato de cada una de las proposiciones.

Paso a detallar, sin mas demora, nuestro menú :

Comenzamos con un par de aperitivos : Beignets de crevette ( gambas rebozadas) y un pequeño guiso de Cèpes et foie-gras ( Boletus y foie-gras) . Ambos buenos.

Como entrantes tomamos :

Grosse raviole de langoustines et crabe, créméux de céleri avec espuma de bisque à la citronnelle, tombée de jeunes pousses d'épinards. ( Gran raviole de cigalas y cangrejo, cremoso de apio con espuma de crema de citronela, y espinacas frescas). MC lo encontró muy bueno.

Thon rouge de Mediterranée en tartar et en tataki au sésame, sorbet passion et poivre séchuan. (Atún rojo del Mediterraneo en tartar y en tataki con sésamo, sorbete de maracuyá y pimienta de Séchuan). Excelente producto y muy bien preparado. Buena combinación de sabores. Si buscamos un pero..., si así puede catalogarse, fue que a nivel presentación, el sorbete empezaba a pasar al estado liquido, debido al tiempo de espera del servicio, pero eso no influyó en la calidad del plato.

Como plato principal ambos nos inclinamos por la misma opción.

Lotte rôtie et son jus de coques au champagne et petits poids à la française ( Rape asado y su jugo de berberechos al champagne y guisantes a la francesa). El pescado riquisimo y perfectamente cocinado. Un plato de una gran sapidez. Para mojar pan sin moderación. Un platazo.

Como postres tomamos :

Comme une tarte au citron meringuée renversée et sorbet citron basilic (Como una tarta de  merengue de limón deconstruida y sorbete de limón y albahaca). Bueno, con una muy buena nota para el sorbete.

Cigare crémeux chocolat noir et mousse Baileys, glace café. (Puro cremoso de chocolate negro y "mousse" Baileys con un helado de café ). Muy bueno.

Para beber, tomamos una botella de agua de la casa y una botella de vino blanco crianza R Les Roques Roussanne 2018 IGP Pays d'Oc. (foto 1er comentario) Domaine J.M.Boillot. Cepages 100% Roussanne. Crianza de 10 meses en barrica de roble francés. La misma que tomamos en marzo 2020 pero con una añada y un tiempo de crianza diferentes. Amplio, equilibrado, mineral, algo afrutado y con un buen regusto en boca. Como la ultima vez, fue el vino, de las características que buscaba, con el precio mas razonable de los que vi en la carta (31 €).  Acompañó bien la comida.

Finalizamos con dos buenos cafés y unos petits fours (foto primer comentario).

La cuenta ascendió a 75 €/persona. Buena RCP. Buena cocina de temporada y de producto.  Para significar la falta de rodaje de la puesta a punto del servicio en mi puntuación bajaré la nota del entorno. Supongo que una vez cogido nuevamente el ritmo de crucero todo volverá a ser como antes. Os lo contaré en una próxima visita. Recomendable.