Nivel

Aquí todo alcanza un alto nivel. Las vistas , los cochazos del parking, la cocina que se ofrece, el producto y los precios. Todo es de nivel. No es mi restaurante preferido , su RCP, a mi no me compensa, pero esta vez no elegía yo. El restaurante , el caserío ,impresiona más fuera que por dentro. Su localización ,es precioso. Por dentro algo anticuado , más para nostálgicos. Estaba repleto , por cierto . La carta de vinos es muy clásica y en este ámbito  , sobre todo en el de Rioja, tienen de casi todo. Me costó elegir uno por el que precio , completamente desorbitado en todos. Sabiendo que tampoco ofrece vinos difíciles de conseguir, lo que decía, fue difícil decidirme por uno, no es la dinámica de precios en los vinos habitual en Bilbao , mucho más moderados. La cocina muy rica. Decidimos no tomar chuleta ni pescado( nos daba miedito...). Croqueta de cigala, jamón de bellota, albóndigas , pimiento relleno de txangurro, garbanzos con bogavante y tarta de queso horneada . Tengo que decir que todo a una alto nivel. De hecho los garbanzos y el pimiento me impresionaron. Se ve que lo que ofrecen lo cobran caro , pero lo cuidan , eso es bueno . Todo excepto el jamón, mal cortado y poco curado ( con ese precio, en fin..). El servicio no es para detalles. Acude mucha gente, supongo que con pasta, que los conoce, se saludan como viejos conocidos  y takatá...En fin , buena cocina, cocina tradicional, buen producto , buenas vistas y si estás dispuesto a pagar lo que piden , disfrutarás.