Restaurante Bar Matalauva. en San Sebastián/ Donosti/ Donostia
Restaurante Bar Matalauva.
País:
España
Dirección:
Cód. Postal:

Añadir tipo de cocina

Vino por copas:
Precio desde:
5,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Nota de cata PRECIO MEDIO:
10 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
7.6
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
6.0
Comida COMIDA
7.8
Precio medio entorno ENTORNO
7.8
RCP CALIDAD-PRECIO
8.5
Opiniones de Bar Matalauva.
OPINIONES
2

Local limpio, aspecto bistro, personal atento y cercano.

Vinos por copas normal algo escaso quizás, cerveza buen tirada y sidra de Igueldo Calonge.

Pedimos la sidra para armonizar de primero salmorejo, buena textura, fresco de sabo.

Luego pintxo de txuleta vieja en salazón muy interesante con gran sabor y textura, viene con crema de piquillo y patata paja para envolver la lámina de la txuleta.

Tienen postres como veréis en la carta pero no pedimos, todo lo elaboran ellos, precio no es caro para la calidad que ofrecen, tienen terraza.

Últimamente el facebook me da buena información y así es como he descubierto este pequeño bar, a continuación os pego el comentario del blog por el que descubrí este pequeño local, el autor es Igor Cubillo, periodista y su blog es “Lo que coma don manuel”.

Antes deciros que nosotros pedimos la muxurra ahumada, la maridan en azúcar y sal y luego la ahuman y la aliñan, muy rica, también un bocadillo de coppa ibérica joselito, la zona de atrás del cuello del cerdo, un sabor entre jamón y lomo, te lo calientan un pelin para que sude, delicioso, gente joven y que te explica la elaboración de todo, un detalle.

Precios más que razonables, hablando de Donosti, el plato de la foto de mojarra 9€, y el bocadillo 3,5€, tres ruedas a 1,2€, una opción muy interesante, por el buen producto y las sencillas, pero sabrosas elaboraciones, el propietario, Borja García Argüelles, lleva años trabajando en I+D en el Akelarre.

Pero a continuación os pongo el texto de Igor cubillo, el que me descubrió el local.

“Matalauva, como la semilla asiática de uso medicinal y repostero que también llamamos anís verde, matalahúva, pimpinela blanca, hierba dulce, matalahúga o pimpinella anisum. Así ha llamado el bueno de Borja a un barcito con dos únicas mesas (mesitas, diría hoy), austero interiorismo y una clientela de lo más estruendosa donde presenta una oferta de picoteo diferente y de calidad. Las técnicas se cocción a baja temperatura y la regeneración de alimentos constituyen la base de una carta corta, pues contiene únicamente 14 propuestas, que se abre con embutidos deliciosos, como son el jamón ibérico (24€) y la coppa (cabecero de cerdo con sal marina, pimienta y ajo) ibérica (18€) de Joselito, y jamón de pato (18€) hecho allí mismo. Está bueno el platillo de muxarra ahumada (6,50€), guarnecida con cebolleta, pepinillo, alcaparra y cebollino, aunque a mí me pide un pelín más de swing, y me quito sombrero y bisoñé ante el carpaccio “de roasted pig” de presa ibérica, dispuesto bajo queso y rúcula. El cocinero primero cura la carne en tres partes de sal y una de azúcar, durante ocho horas; la primera tiene como misión quitar con su acción el sabor a crudo y el azúcar que no resulte salado; posteriormente, una vez curada la carne, quita ambas (sal y azúcar) y marca la pieza en la parrilla, con lo que consigue un toque ahumado abracadabrante. Ya está lista para ir cortando según se va solicitando.
Las alcachofas se preparan al vacío, a baja temperatura y sin agua, para mantener su sabor y color, y se emplatan con pasta pura de almendras. La huerta también procura calabaza rellena de su crema y sus pipas (9,50€) y, atención especial a su ración de ‘patatas’ un señor plato de tubérculos y raíces (9,50€), asados a distintas temperaturas, que reúne chirivia (“madre de la zanahoria”), patata azul, patata morada, boniato, colinabo, tupinambo y en ocasiones mastuerzo, raíz de la flor de la capuchina, un bulbo que, por lo visto, aúna sabor a regaliz y picante.
Del mar llegan los protagonistas de la clásica combinación de anchoas, bonito y piparrak (10,50€), y plasmo aquí mi decepción con la bolsa de mejillón de roca (12€), que se cocina en su propio jugo encerrado, con chalotas, laurel y pimentón, en una bolsa como esas donde se meten al horno pollo o costilas con condimentos deshidratados. Y de los cuatro postres sólo he comido el tiramisú “hecho por un italiano” (6€), pero ya les digo que procura deleite. Otra vez tal vez me decante por tarta de pera con salsa de chocolate (6€), queso artesano con nueces asadas (9,50€) o el clásico café irlandés (6€).
En resumidas cuentas, el hombre que desarrolla nuevos platos, técnicas y pruebas bajo supervisión de Subijana, el entendido que prepara los cursos y demostraciones que se desarrollan en el Aula de Cocina de Akelarre, así como las ponencias y presentaciones del tres estrellas en el exterior, baja a tierra, se torna pragmático, saluda al vecino y prescinde de la fantasía en Matalauva. La carta de vinos es también corta, pues sólo hay un cava, un champagne, un txakoli, cuatro blancos y tres tintos, tasados entre 12 y 44 euros. Y la terraza no la ha cerrado. Quiere ir poco a poco Borja, sin pillarse los dedos. Si mantiene el nivel de esa carta más que meritoria para una cocina sin salida de humos y empieza a dar servicio, más o menos clandestino, en ese almacén al que accederíamos por cocina, el siguiente paso estará dado. Sin prisa, pero con calidad, cariño y originalidad, y sin pausa. No es mala fórmula.”
(Igor Cubillo)

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar