Dado que fue el restaurante que mas nos gustó de todos los visitados en Nápoles, y como no teníamos ganas de tentar otra aventura desconocida, decidimos tomar nuestra última cena napolitana en La Cantinella.

No voy a describir de nuevo el restaurante pues ya lo hice en mi otro comentario de esta mañana ( https://www.verema.com/restaurantes/133322-cantinella-napoles/valoraciones/1413530-buen-ristorante-napolitano ), solo decir que tanto el servicio de sala como el servicio del vino fueron tan buenos o mas que la primera vez y en esta ocasión con el restaurante a tope, ya que se trataba de un viernes por la noche.

Como ya habíamos tomado la primera vez un menú degustación, optamos por cenar a la carta.

Primeramente nos sirvieron un Piccolo stuzzichino di Benvenuto : Frittelle di Araci con burro di pistacchio e prezzemolo Pequeño aperitivo de bienvenida : Buñuelo de anchoas con mantequilla al pistacho y y perejil rizado. Muy bueno

De primero tomamos

L'Insalata di mare cotta al momento con misticanza croccante La ensalada del mar cocinada al momento con stevia crujiente, calamares, pulpo y gamba roja. Excelente

Sauté misto ai frutti di mare Salteado mixto de frutos del mar, almejas y berberechos con dos rebanadas de pan tostado ajadas. Rico, rico, riquissimo.

De segundos

MC tomó el mismo plato que habíamos degustado en nuestra última visita :

Fettucelle di Gragnano agli scampi, pesto al prezzemolo e crumble ai pinoli e pomodorini del pendolo grigliati Fettucelle de Gragnano con cigala, pesto con perejil rizado y crumble de piñones y tomates de péndulo a la parrilla. Perfectamente cocinado, tan bueno como la vez precedente Un platazo.

Rissotto agli agrumi con carpaccio di gambero rosso, crudo di ostrica, limone candito e prezzemolo Rissotto con citricos, con carpaccio de gamba roja, y gamba troceada, ostra cruda, limon confitado y perejil rizado. Disfruté, se me hizo corto. El carpaccio revuelto con el arroz, una verdadera explosión de sabor a mar, la ostra deliciosa... Riquísimo.

De postres tomamos :

Panna cotta allo zenzero Pana cotta al jengibre. MC la encontró deliciosa.

Yo tomé el mismo postre que la vez precedente Babà Napoletano al rum Como la primera vez, buenísimo.

Para beber tomamos una botella de agua mineral con gas San Pellegrino de 0,75 l y una botella de vino blanco de crianza que me recomendó el maître, que también hace las funciones de sumiller , un Campanaro Feudi di San Gregorio 2015 DOC Irpinia bianco Bodega Feudi di San Grgorio Società Agricola Spa Sorbo Serpico. Fermentado y criado en barricas de roble durante 6 meses. Cepajes Greco bianco 50% y Fiano (50%) . Vino muy luminoso, brillante, intenso, con mucha consistencia, buena acidez, fresco y mineral. Me gustó mucho.

Finalizamos con dos buenos cafés y unos petits fours (chocolates)

La cuenta ascendió a 80 €/persona. Buena RCP. Buen restaurante, buena cocina de producto de proximidad y de mercado con un toque de creatividad. Todos los pescados son frescos y salvajes del Golfo de Nápoles, excepto ciertas anchoas, que vienen del Cantábrico. El restaurante posee un plato en la guía Michelin. Recomendable.

Si tuviéramos que volver a uno de los restaurantes visitados en Nápoles, sin ninguna duda seria éste, exceptuando las pizzerías.

El martes 18 de abril teníamos reserva a las 20h30 en La Cantinella, restaurante ubicado frente al mar en el agradable paseo marítimo del Lungomare en el Quarteri de Santa Lucia.

Este restaurante, propiedad de Giorgio Rosolino, que por lo que he leído, es un precursor de la nueva cocina napolitana, es muy diferente a todos los otros restaurantes que hemos visitado durante nuestra estancia en Nápoles.

Decorado en estilo colonial "napolitano", con cañas en las paredes y en el techo, desde sus ventanales se divisa el mar Tirreno y se respira tranquilidad. Sus mesas están bien separadas las unas de las otras, bien vestidas con buenos manteles, buena vajilla y cubertería, y buenas copas Riedel. El servicio de sala es muy bueno, profesional y al mismo tiempo simpático y cordial. El servicio del vino también es muy bueno, descorche, cata y servicio esmerado durante toda la cena. Poseen una importante carta de vinos, principalmente regionales e italianos, champagnes, algunos vinos franceses y un par o tres de vinos españoles. Puede verse una foto de una vista parcial del restaurante en el primer comentario.

Proponen carta y dos menús degustación. Optamos por el menú degustación "Angelo", el mas largo.

Para empezar nos trajeron un Piccolo stuzzichino di Benvenuto : Frittelle di fiore di zucchine con ricotta . Pequeño aperitivo de bienvenida consistente en un buñuelo de flor de calabacin con ricotta. Muy bueno. Buen principio, nos dijimos, y acertamos.

Siguieron :

Crudo di mare, 2 gamberoni, 1 scampo, carpaccio di pesce, tartara, 2 ostrica, 3 tartufi di mare Mariscos y pescados crudos: 2 gambas, 1 cigala, carpaccio de besugo y de lubina, tartar de atún, 2 ostras, 3 berberechos, 1 frambuesa y 3 arándonos. Excelente.

Fettucelle di Gragnano agli scampi, pesto al prezzemolo e crumble ai pinoli e pomodorini del pendolo grigliati Fettucelle de Gragnano con cigala, pesto con perejil rizado y crumble de piñones y tomates de péndulo a la parrilla. Muy bueno, perfectamente cocinado.

Mientras esperábamos el siguiente plato, nos trajeron fuera de menú unas habas tiernas que estaban riquísimas.

Filetto di Pezzogna ai profumi mediterranei con patate Filete de besugo al perfume mediterraneo con patatas. Excelente cocción. Muy sabroso. Buena salsa para mojar el excelente pan que nos sirvieron (ver foto en primer comentario)

De postre tomamos :

Babà Napoletano al rum Baba napolitano al ron. Buenísimo.

Para beber tomamos una botella de agua con gas Surgiva de 75 cl y nuevamente una botella de vino blanco de cultivo biológico Vigna del Vulcano, DOC Lacryma Christi del Vesuvio 2014 Società Agricola Villa Dora. Cepajes : Coda di Volpe y Falanghina. Vino volcánico de vendimia manual y maduración en cubas de acero inox. durante 6 meses con sus lías. Un vino muy armonioso con buen acidez y elegante. Con los postres nos invitaron a dos copas de vino dulce napolitano, de cuyo nombre no me acuerdo, solo recuerdo que estaba muy rico, una especie de garnatxa tinta.

Finalizamos con dos buenos caffés passalacqua y unos petits fours Pastiera napoletana e cioccolato Pastiera Napolitana y chocolates. Muy bueno.

La cuenta ascendió a 81 €/persona. Buena RCP. Buen restaurante, buena cocina de producto de proximidad y de mercado con un toque de creatividad. Todos los pescados son frescos y salvajes del Golfo de Nápoles, excepto ciertas anchoas, que vienen del Cantábrico. El restaurante posee un plato en la guía Michelin. Recomendable.

El único de los restaurantes napolitanos que visitemos al que nos dijimos que seguro que volveríamos y así lo hicimos, para cenar a la carta, dos días después... y cuya crónica volveré a colgar en breve.