Esta vez sí, a pesar de mi último comentario en el que plasmé mi decepción por la comida le dimos otra oportunidad como consecuencia de una malísima gestión en la reserva on line porque telefónicamente me fué imposible cotactar a pesar de intentarlo en intervalos de 15 minutos en repetidas ocasiones en un restaurante del Barri Vell en el que no habíamos estado, era la primera ocasión en que hacíamos reserva de mesa y que a pesar de que posteriormente recibimos varias llamadas queriendo enmendar la ineficacia que habían demostrado, rehusamos el ofrecimiento reservando mesa en el restaurante que nos ocupa.
Compartimos una buena y abundante ensalada mezclum con alcachofas confitadas, jamón ibérico y vinagreta de miel, y calamares a la romana caseros también muy buenos y que ya habíamos comido en otra ocasión.
Seguimos con corvina al horno y solomillo de vaca con guarnición de patatas fritas caseras y pimientos de Padrón, servido sobre losa de pizarra donde conservar caliente la carne y el acompañamiento.
De postre un tiramisú casero que compartimos.
Acompañamos la comida con el espumoso Blanc de Blancs de Raventós i Blanc que hace pocos años abandonó la D.O. Cava para iniciar en solitario la indicación geográfica Conca del Riu Anoia y que no sé si se han añadido otros productores a esta indicación geográfica. El servicio del mismo consistió en descorche y primer servicio
Dos cafés