Tras "acomodarnos" en una mesa junto a la puerta de entrada, que se deja abierta durante todo el servicio ? (observas el trasiego de gente por la calle o entrado a la barra), y pedir unas cervezas(no tenían vermut), se acercó el maitre, supongo, y... pese a que en el momento de la reserva solicité su plato "estrella", gargouillou con cangrejo, contesta que los sábados para qué lo van a tener y que vuelva la semana "que viene"...
Acto seguido, le solicitamos que nos aconseje- por el tema del tamaño de las raciones, pedir mas o menos cantidad- , y nos remite a la carta...
Servicio deficiente, sin ganas, antipático y poco profesional.
Aperitivos: mouse de mortadela-curioso- y samosa
Dos ostras-una de ellas mal abierta- que tuvimos que reclamar en tres ocasiones(20 minutos de espera para dos ostras!!)
Pato pekín...correcto.
Gua Bao de pez mantequilla(ahumado!!!)...mal presentado y escaso.
Hojaldre de setas (24 unidad)...hojaldre correcto; las setas(boletus) con poco aroma...congeladas?.
Huevo con trufa y setas...dos senderuelas con un huevo y una masa de puré de patata infumable. A la trufa la están buscando......Opté por comerme las dos senderuelas...me preguntó el camarero si no me había gustado el plato,evidentemente le contesté que no...Ni el responsable de la sala, ni en cocina se dieron por aludidos; me retiraron el plato y a por" el siguiente".
Como principal,opté por el salmonete con romescu....buen producto. pasado de cocción; la romescu, mi salsa preferida,la peor que recuerdo haber probado en tiempo.
La mayoría de platos llegaron sin temperatura...uff
Del resto de platos, nada destacable... tartar de atún, solomillo de vaca con hueso( con nervio y frío), cochinillo crujiente(si lo presentan si la piel, cómo va ser crujiente!!) y canelón de pollo.
Postres correctos, destacando la tarta de manzana, y defraudando la pasión cítrica...dulce, sin acidez, plana...
Entre otras deficiencias en el servicio, cabe destacar el hecho siguiente: tras servirnos el pato pekín, nos sirven al centro el hojaldre.Comoquiera que el pato venía con salsa hoysin, y no quería mezclar dicha salsa con los boletus, solicité que me cambiaran el servicio. Al acercarse el camarero, mi mujer también solicitó que se lo cambiaran ....el camarero con mal gesto, bufó...y nos lo cambió,!qué suerte! Al resto de comensales, como no lo pidieron, pues no tuvieron tal suerte.
Al entrar, nos ponen un pequeño bol con olivas.(no importa que sean dos o seis los comensales. un bol!!)
De bebercia dos botellas de Pazo de Setorans 2015 (23), un Albariño.
Cafés, y adiós...ni se interesan por tu opinión, ni por el plato devuelto, ni te detallan qué lleva cada plato, ni...en fin...no creo que vuelva aprobar el cangrejo la semana próxima!!!
Este tipo de trato al cliente hace un flaco favor a aquellos profesionales que le ponen amor, trabajo y entrega en cada plato.
En la puntuación sobre el "entorno" del local, valoro el restaurante, no que esté en el mercado de Colón.