Cenar y "posturear"

Local ya bien descrito en el comentario anterior, a lo que añadiría que la sala principal está en un nivel de suelo algo inferior a la parte de reservados (incluida cortina para cerrarlos, si es preciso y algunos con baño propio). Cuenta además con wine bar, coctail bar y bar propiamente dicho, en la zona de la entrada del local, muy decorado. Las mesas miran a un mini scenario con actuación en directo por la noche. Mesas bastantes llenas y en general gente guapa y más bien joven.

En el reservado en que estuvimos los 10 comensales, algo justitos pero muy cómodos; mesa bien vestida, copas muy correctas, buen cambio de platos, servicio muy amable y "enrollado" manteniendo buena educación. Menú Premium era lo acordado y fué lo servido:

. entrantes a compartir al centro en buena proporción y raciones: 

Ensalada de burrata, higos y tomate fresco: bien preparada y aliñada; el contraste del higo aporta

Tortilla Tatel: una clásica tortilla francesa y con espuma de clara de huevo y sobre todo con una buena presencia de trufa que huele desde lejos. Muy recomendable.

Croquetas de jamón ibérico: buenas, jugosas en su interior.

. principal a elegir, y tras descartar la merluza de pincho, y siguiendo el entusiasmo del camarero:

Carrillera de cerdo ibérico: 3 buenas piezas, bien elaboradas y sobre las que se vertió a última hora (y les faltó integración estando cada elemento por separado) una buena salsa de carne bien reducida y sabrosa. Acompañaropn unos buenos pimientos de piquillo en plato compartido aparte.

. postre a elegir y de nuevo siguiendo las recomendaciones del camarero, unos pocos optaron por la tarta de zanahoria y helado de coco, pero la mayoría:

Flan de queso Brie, espuma y nata helada: buena textura, buen sabor y correcta compañía. Recomendable.

En la parte de bebida y las consabidas previas cervezas, aguas con y sin gas, tomamos blanco de Muga y de tinto Señorío de Villarrica. Desconozco como está el tema de carta de vinos por ir a menú prefijado.

Los que quisieron cafés tomaron cafés tras algunos despistes. Otros incluso Gin Tonics en el bar antes de salir.

La sensación es de que hacen bien la cocina, pero el local y los clientes buscan que el postureo sea una parte importante; y eso que era lunes noche, con lo que no quiero ni imaginar lo que será en el fin de semana.