Local en el Vedat de Torrent con platos típicos de la gastronomía valenciana, rodeado del bosque mediterráneo de la zona. Los platos de la comida fueron:

* Esgarraet: sabroso y abundante.

* Mandonguilles d'abaetxo: Albondigas de bacalao crujientes por fuera y predominio del bacalao sobre la patata en su interior.

* All i pebre de gambas: Versión lograda del all i pebre clásico de anguila.

* Paella valenciana: Sublime, con el arroz en su punto de cocción y las judías verdes y garrofó fresco, que se deshacían en la boca.

* Tarta de crema de horchata con piñones. En su punto de dulzor, sin empalagar.

* Vino D. O. Requena Bobal.

Trato muy amable, servicio rápido y profesional y buena relación calidad precio. Para disfrutar de los platos de la "terreta", y más cuando se vive fuera de ella.

Excelente restaurante con una cocina clásica, que valoro muy positivamente. Conserva la esencia para disfrutar de una paella "de toda la vida".

Aunque está pasando la modo de la "deconstrucción" de recetas extraordinarias, se agradece disfrutar de lo auténtico. 

Para empezar un esgarraet, calamares y gambas al all i pebre.

La bodega es un poco reducida pero suficiente.

Muy recomendable pero sabiendo a lo que se va.

Comida de trabajo en un emplazamiento para mi espectacular, El Vedat de Torrent, no es la primera vez que visito este restaurante. Amplio,bonito,mesas con muy buena separacion y con cristaleras enormes,todo esto ubicado entre pinos autoctonos de la zona.
Comida tipica valenciana,platos de picar al centro y espectacular la paella de pollo y conejo,la mejor que he comido en este local tomamos un Muga reserva.

Comimos y salimos a 45€ por persona (principios de diciembre). Comimos Paella/Arroz Sinyoret. Picamos calamares, ensalada, clochinas, jamon-queso. De postre variado de tarta y fruta. 3 botella de vino de 14 €/una para 18 personas. No volveré mas. En Navidad vale todo y los tiempos no están para perder clientes

Lo visito habitualmente, normalmente mas entre semana y tengo que decir que nunca me defraudan, me considero bastante exigente con nuestra paella valenciana y digo que la de este restaurante hecha a leña, y con productos de la tierra me parece de las mejores que pruebo en esta Valencia que habitualmente algun maltrato que otro se le da a este plato. Creo que sus calamares y sus postres tambien estan mas que aceptables. Al vino normalmente no le dan trato, sirven la botella, la abren y se van. Mejor visitar durante la semana, los Domingos,no es lo mismo, la aglomeracion y las prisas no son buenas.

Solo tiene la paella. Es cierto que la paella es de lo mejor que se puede encontrar en toda la comunidad. Pero ademas de eso no se puede esperar nada mas...maltrato al vino tanto en variedad como en el servicio, poca variedad en las entradas y nada diferente a cualquier "barecillo" y el postre...todo industrial menos su tiramisu. En resumen...si solo buscas disfrutar de una gran paella esta bien, pero si buscas algomas olvidate de venir a este local.

Es la mejor paella valenciana que puedes comer hoy por hoy cualquier dia de la semana hecha a leña,los entrantes sin ser muy variados son de muy buena calidad y elaboracion , como sus postres. Que al final es lo que yo estoy buscando de un resataurante ,que comas bien,calidad y precio respetable.Mejor ir entre semana,por la aglomeracion....

saludos

Perfecto entorno para disfrutar de unos arroces únicos, bien elaborados, presentados y equilibrados en precio. Poco que añadir a los anteriores comentarios. El Romeral brilla por su sencillez pero por su buen hacer. Aunque también debo decir que es mejor no intentar bucear demasiado en su carta y ceñirse a lo seguro, a las recomendaciones que en el mismo restaurante nos ofrecen.
Lástima la bodega, totalmente desangelada tanto en su selección como en el trato que se le da al vino. En ocasiones la falta de respeto por esta esencia te hace plantearte el volver a pedir vino o buscar otras alternativas.Un verdadero fallo.
Servicio rápido, eficaz pero poco profesional, sobre todo en hora punta y fines de semana.
Un buen local para celebraciones con la familia o amigos, no demasiado apto para cenas en pareja.

Sencillamente es el mejor restaurante para degustar la autentica paella valenciana, su secreto...experiencia y honradez.
Local enorme, recientemente reformado que hace algo mas agradable la estancia que antaño, dedicado en fines de semana a celebraciones de todo tipo y entre semana a comidas de empresa, cuenta con una gran tradicion en la comida regional valenciana, su carta es honesta asi como sus precios, tal vez le falta un poquito de adecuacion a los tiempos que corren, mas orientacion al cliente, aunque he de reconocer que sus camareros son todos ellos amables y muy profesionales, el vino lo tratan a patadas, nadie les ha dicho que existe la posibilidad de cuidarlo mejor, su carta de vinos es inadecuada en el lugar y en el tiempo y de coperio mejor ni hablar.
Alli se va a degustar sus arroces, insisto en su paella, da lo mismo que sea de 4 que de 40, siempre esta perfecta, del entorno ni digamos, todavia quedan alli suficientes pinos como sentirse a gusto.
Mencion especial a sus postres todos ellos caseros, en especial su tarta de avella o tiramisu, que en conjunto hace que te plantees aterrizar por alli con cierta asiduidad si te gusta disfrutar de una paella tradicional hecha con leña y mimo.Excelente RCP, y perfecto aparcamiento hacen que sea uno de los santuarios de la paella, a la que ademas hay que proteger y exigir su obligado cumplimiento.Nunca defrauda.

Extraordinario arroz al "senyoret", es decir de marisco pero "pelado", para que no se moleste Vd, en "mondar" nada, así de "señorito", antes entrantes de sepionet, esgaraet, esto es bacalao y pimiento, ajos y amucho aceite de oliva, con puntillas y calamares, y claro ensalda "valenciana", buen postre, tartas variadas y vino Paternina crianza 2002 y demás, buen paisaje, rodeado de pinos por todos lados, y buen servicio, y todo ello por 23 euros cabeza, muy buenos arroces a un paso de Valencia, recomendable.