La muy grata sorpresa

Restaurante muy cercano al hotel donde nos alojábamos y que nos llamo la atención por la puesta de las mesas y su decoración y dirigido por dos hermanos, Fernando y Domingo. Ambos buenos profesionales y especialmente Fernando, gran amante de los vinos y así lo acredita su carta.
Cenamos en él nuestra primera noche en O Freixo y como nos encantó volvimos todas todas las restantes, hasta un total de tres.
Miércoles y jueves cenamos en el gastro bar, sito en la planta baja. El viernes, día de más trabajo, abren el comedor del primer piso, en el que hay amplitud y mesas muy bién vestidas.
La vajilla y el coperio son buenos en ambos ambientes.
De obligado cumplimiento a la hora de la cena fueron :
- Camarones, 250 gr.(23,75), Soberbios, recién cocidos en agua de mar y con sal maldon por encima.
- Calamares de la ria(15,00), Impresionantes los más de 12 calamares y de tamaño pequeño. Del tamaño de un dedo de mujer.
- Otros platos que fuimos probando a lo largo de las noches :
- Necora (10,00), muy sabrosa y de buén tamaño. También cocida en agua de mar.
-Berberechos (13,00), espectaculares de sabor a mar. Sin nada de arena y abundante ración.
- Zamburiñas albardadas con verduras y jamón ibérico (12,50), Buena ración, original plato que nos satisfizo y agradó, acostumbrados a tomarlas a la plancha o, como mucho más, con un ligero sofrito de ajo y almendra.
En cuanto al capítulo de postres, son todos caseros, de gran nivel y hay que destacar, y mucho, su flan de huevo(4,50), nunca había comido un flan así y envidia de algún que otro hostelero con rte. que cuando va a comer o cenar se pide 3 porciones. ¿Verdad Juán? el de Caldebarcos, las cañitas rellenas (1,25), la copa de queijo (4,50) y la tarta de manzana(4,80).
Acompañamos nuestras cenas, aconsejados por Fernando, con los siguientes vinos : Albariño Pazo Baión(17,50), viejo conocido mio y uno de los grandes de Rias Baixas, Finca Vinoa, D.O. Ribeiro, me sorprendió y a lo grande, Canción de Elisa, D.O. Ribeiro, otra muy grata sorpresa y Casal de Arman Barrica Blanco 2008, ¡Sorprendente! y Arman Blanco Dulce, otra sorpresa del viaje y además gentileza de Fernando.
La carta de vinos es muy buena y con especial dedicación a los vinos gallegos, tienen todas las D.O. y especialmente los Ribeiros.
El servicio del vino, tanto en el gastro bar como en el rte., es muy bueno. Enseñan la botella antes de abrirla, la descorchan con sumo cuidado, huelen el corcho, dan a probar y reponen la copa cuantas veces sean necesarias. Gran profesional del vino es Fernando.
Un rte. al que volveré sin ninguna duda.