Me llamó el amigo Joan Thomas diciéndome que el sábado tenía mesa en El Celler de Can Roca en compañía de Juanjo, un casi paisano, ya que es de esa aldea que hay un poco más arriba del Nervión antes de llegar a Portugalete, Bilbo creo que se llama el pueblecillo en cuestión.
Entre varias opciones y con ganas de quedar bien con el vasco, nos quedamos al final con los restaurantes Occi y Divinum, descartando el Occi ya que al pedirles Joan información vía Mail sobre menú degustación no se la facilitaron, así que ya que los dos habíamos visitado el Divinum y ambos nos quedamos con ganas de volver, no lo dudamos.
Creo que tanto el local como el servicio han quedado ampliamente comentados tanto por Joan como por mi mismo en anteriores entradas, simplemente añadir que en esta ocasión al estar en un reservado el entorno ha subido algunos puntos.
Así que vamos a pasar directamente a lo comido y lo bebido.
Tomamos asiento y empieza el festival con una cata de sales y aceites. Tres tipos de aceite y dos de sal, probablemente lo que acompañó a la copa de cava de bienvenida.
Seguimos con Coulant de foie con membrillo y manzana. Un guiño a uno de los clásicos de Juan Roca?
Y Tataky de atún con caldo dashi y crujientes de cebolla. Muy rico, aunque quizás el acompañamiento enmascaraba un poco el sabor del atún.
Uno de los mejores platos de la noche Pulpitos con ajo blanco y cremoso de ajo negro. Cambiaron los chipirones por pulpitos con un resultado espectacular, lamentablemente la foto no hace justicia al plato.
Y otro que no se quedaba atrás Canelón de Pularda con colmenillas a la crema. Soy un "canelonista" declarado, y si encima el canelón es de pularda y a salsa de colmenillas ya ni te cuento, otro acierto.
Y llega el pescado, representado por la Lubina con cítricos, bergamota y mantequilla de avellanas. Con mantequilla de "noisette" que diría el amigo Joan, jejeje.
Para finalizar nos dan a legir entre varias opciones, por lo que alguno se decantó por Cabrito del Mas Alba con berenjenas ahumadas y espárragos. Otros lo hicieron por Solomillo de Girona. Y el resto lo hicimos por un riquísimo Steak Tartare maridado con Gin Tónic. No sé si Joan Morillo (jefe de sala y propietario), me oyó decir que me entusiasmaba el Steak maridado con GT y tuvo el detalle, o es que en la casa ya los sirven así por norma. Por cierto, preguntaron antes si lo queríamos picante y yo lo pedí picante, así que el mío estaba en su punto.
Y vamos entrando en los postres:
Con una Degustación de quesos. Curiosamente aparte de alguno de la zona, otros los compra en la zona de Montpellier patria chica del amigo Joan y de su esposa MC.
Con una Sopa de cítricos y menta con merengue italiano. Refrescante.
Y finalizamos con un divertido postre, Tubo de chocolate con aire de frambuesas y fresas. Lo cierto es que el “formato” del postre nos dio que pensar y cada uno optó por una manera de meterle mano, pero sin duda el que triunfó, aunque se niega a compartir la fotografía fue el amigo Juanjo, que se lo zampó de una manera que no me atrevo a describir.
Para beber:
Pues lo descrito por al amigo Joan en el comentario anterior.
La Cuenta:
413 euros para seis personas. Una muy buena relación calidad precio, teniendo en cuanta la calidad de la comida, el servicio y el entorno.
Poco que añadir al anterior comentario, de acuerdo en todo especialmente a lo de que hay que volver, y cuantas más veces mejor.