Visita por tierras segovianas y si pruebas cochinillo y cordero, y ponche segoviano, pues te falta un whisky que también se fabrica por allí.
Color ámbar claro, limpio. En nariz aromas fundamentalmente alcohólicos que dificultan apreciar la madera que queda al fondo. En boca es de armas tomar y a mi que soy más de moscateles, brandys ajerezados y rones añejos y no me gusta (después de catar) poner hielos o refresco, se me hace imposible de acabar.

Whisky demasiado mediocre aunque un interesante desarrollo con respecto a su hermano menor
el 5 años (imbebible por cierto), estos 3 años lo mejoran sustancialmente y en mi opinión
son imprescindibles, supongo que lo embotellan antes para hacer caja, viva el botellón!!.

Apariencia: Ámbar claro, casi pajizo, dorado.

Nariz: Floral, vainilla, alcohol muy poco integrado que llega a molestar, dulce, denso,
suave, limón, madera de roble y ligeramente especiado (nuez moscada, anís).

Boca: En boca es donde se aprecia la notable mejoría con respecto al 5 años. Cuerpo ligero,
sin demasiados matices, limón, desarrollo muy plano.

Conclusion: Es un Whisky que se queda en tierra de nadie, no es malo pero tampoco tiene nada que llame la atención. Habrá que probar el Pure malt, y el Single malt para ver si es verdad que hay whisky en Segovia. Lo último por comentar es el precio, algo elevado para la calidad del producto.

Este no falla, siempre esta dispuesto, aunque le tengamos escondido al fondo del mueble y le ninguniemos continuamente, y mira que le hacemos perrerias, pero como buen amigo nunca nos deja solos.

No viene de tierras lejanas y por eso puede que lo valoremos menos, pero se presenta con un color ambar brillante con destellos dorados, en nariz es suculento, potente, algo soberbio, pero más recatado que su hermano más joven. Madera, ahumados e incluso salino.

En boca es fuerte, recio y con el alcohol dando guerra, pero si estas acostumbrado a tanto highlander tanto jura y tanto island, que nos va a asustar este??

Acabas combinandolo por que se pone muy chulo, pero solo con hielo puede hasta parecer que se lo merece.

Segovia tiene acueducto, vino, cochinillo y whisky, a ver quien iguala.