Es un hotel muy bien situado, junto a una parada de metro y líneas de autobuses que te llevan a los sitios más conocidos, Cerca del Parque Kensington, Hyde Park y del Holland Park, cerca también de varios museos (historia, ciencias, , ...) y muy cerca de Notting Hill y de Portobello.
En cuanto al hotel, no es comparable con un 4 estrellas español, pero sus instalaciones son más que correctas y diversas, aunque las habitaciones muy pequeñas. La verdad es que para estar todo el día fuera no importaba demasiado. En el comedor (buffet) el desayuno bastante bueno. Hay varios que saben hablar español, algunos son españoles y todos muy amables, atentos y resolviendonos todos los problemas. El hotel tenía piscina cubierta y zona de relax, pero no la usamos.
Lo negativo es que el wifi hay que pagarlo. Por lo demás todo bien.