-en botella de 0,75L, con xula y bodeguil etiqueta.

decir que la Setembre ("básica") de la misma casa probada hará unos 9 meses, no fué de mi entero agrado.
Pero hay que ser tozudo, pues la gente de Ales Agullons desde Mediona-Alt Penedés, le ponen mucho cariño y pasión a sus elaboraciones.
-de color anaranjado/amarillento apagado camel, turbia, y buena toma de espuma, que siendo casi Lambic sorprende.Evidentemente...turbia.
-nariz fantástica,ligera salinidad, profunda, intuitivamente ácida, muy fresca, campo de manzanas ácidas en atardecer electrizante, naturaleza viva, olor en el precipicio del hedor, al límite. La madera está ahí, acompañando en todo momento. Notas curiosas de brea. El recuerdo esperado de Moscatel, no está, ni falta que hace.
-la boca es si cabe, más lograda. Textura y densidad vinosa, la madera integradísima (y mejorará, seguro), el carbónico es exiguo y omnipresente, pequeñísima burbuja que acompaña en todo momento. Post maderoso junto a frutos secos...y la acidez, sublime, en su punto justo, acompañando.
No sé donde llegará, ahora mismo está muy bien y creo que con margen para mejorar al cabo de unos años. Cerveza para tomar ya y guardarse unas cuantas botellas. Tapón de corcho no estaría de más.
El único pero es el precio, pero si está mezclada con Drie Fonteinen, se entiende, y hay suficientes Frikies (me incluyo) para pagar más de 10€ por este cervezón
SalUT!