Se trata de una casa construida en parte en el interior de la montaña frente al pantano de los Ójos, con un acceso complicado del coche por una empinada rampa que lleva al cementerio y que hay que dejar el coche arrimado en el camino y bajar por un pequeño y empinado sendero hasta llegar a una bonita y reciente casa construida con un pequeño espacio exterior con una estrecha mesa que será buena para desayunar o incluso cenar en verano; una puerta bajita da paso a la propiedad con una parte exterior en la que hay un simulacro de piscina (por el tamaño) y un par de sillas de plástico.

La casa tiene una amplia cocina abierta al salón, bien equipada con nevera, tostadora, cafetera (con cafés), lavavajillas, amplio banco de cocina; en la parte de salón la tele con un doble sofá y una pequeña mesa auxiliar. Tiene además un comedor con mesa redonda para 4 personas, y un par de habitaciones con cama grande más un espacio aparte de relajación con un subespacio abierto para un jacuzzi de buena amplitud y funcionamiento. El baño es moderno y con una buena ducha.

La decoración muy ibicenca con rafias, cañas y cesterías que dan un ambiente alegre y acogedor. Tiene opción de pack romántico de suplemento (35€) de buen cava y caja de bombones.

El desayuno es aparte y hay que pedirlo aparte ya que en otro caso se limita a los cafés comentados.

A destacar las vistas desde la cocina que tiene una ventana mirador cerrada que aporta además importante luminosidad.