Color amarillo brillante con una suave burbuja constante. Muy buena intensidad en nariz en la que desprende elegancia y finura, suaves notas de bollería cremosa con recuerdos de croissants de mantequilla recién horneados, fruta blanca bien madura (manzanas al horno), higos secos, pan tostado, frutos secos (almendras peladas), suaves cítricos (piel de limón), flores blancas, mantequilla fría, suaves notas ahumadas que recuerdan finos tostados de barrica de roble francés que le aportan un suave toque avainillado que va apareciendo al fondo. Elegante y agradable entrada en boca con una burbuja bien cremosa que se va integrando paulativamente en todo su recorrido, muy buena acidez, apuntes de frutillos rojos como la frambuesa y la granada, sensaciones cítricas (mermelada de naranja amarga), amielado, cremosa textura, muy amplio y gran volumen, corpóreo, firme y bien persistente. Final largo, postgusto de fruta cítrica y roja (granada) y retronasal de mantequilla y toques ahumados.

Más información en: www.elvi.net/2015/01/31/krug-grande-cuvee-brut-2003/

Probado en la cata de krug en glasroom, con vilaviniteca y con Monclus de maestro de ceremonias. Es un gran champagne de color amarillo vivo, dorado, por su oxigenación, con mucha burbujas pequeñas. En nariz aromas elegantes y finos a tostados, manzana fresca y manzana compotada, bollería y elementos cítricos. En boca entra muy bien, mucha acidez, buen carbónico muy bien integrado. Frutas, cítricos y bollería, como en nariz. Muy fresco y alegre, aunque en nariz gana la partida.

Perfecto para la ocasion !

Lo cierto es da gusto verlo reposar en una gran cubitera rodeado de piedras de hielo, pero que pena da ver la botella boca abajo poco tiempo despues...

Destapa un sin fin de aromas finos, de croissant de los buenos ( no de esos envueltos en plastico ), de harina y helado de vainilla.Cesto de fresas poco maduras, tambien notas metalicas, de vuelta con ese croissant ! Al final parece asomar algun pomelo? si ? no? quien sabra...

En boca, booom ! que acidez, perece mentira el poder de envejecer de estos vinos, lo tenia guardado mas de 5 años ( y el tiempo que estuviera por ahi...) y por un momento me arrepenti de haberlo abierto, pero no, ofrece tantas cosas que el disfrute es maximo.Esa unsuosidad delicada, esa frescura en el paso, con tanta potencia que desafiaria cualquier maridaje.Vaya gozada de vinos estos champagne.

A pesar de mi reticencia inicial a reencontrarme con un Grande Cuvee más pobre y menos sustancioso y aromático que las viejas botellas, me decido a realizar una nueva incursión en el universo Krug...

La botella no era de las antiguas ni tampoco de las más recientes; aproximadamente 6-8 años desde comercialización; aunque no llenó el aire de nueces y miel como algún otro Grand Cuvee que recuerdo, ofrecía otros matices también sorprendentes y con un potencial evolutivo muy prometedor: vainilla, fresa, fruta negra, brioche, pan tostado, mantequilla, frutos secos, orejones, canela!, etc... Cambiante con la oxigenación, excitante a copa parada e intensamente embriagador cuando se agita suavemente, este vino continua ejerciendo un extraño influjo en mí...

La boca es plena, rotunda y arrolladora; de gran densidad, caricia glicérica y untuosidad grasa, equilibrándose el exceso con una acidez bien armada que le otorgará larga vida...
Postgusto eterno.

A sus pies.

Lote de año base 2005, con 134 vinos distintos de reserva desde 1990 a 2004.

Dorado limpio y brillante, burbuja pequeña y abundante.
Nariz de media intensidad con esa ligera reducción que siempre sale con este vino y que se disipa al poco tiempo. Notas de flor seca, fruta madura y ahumados, con una cierta complejidad. Con más aire aparecen los frutos secos, el café en grano, la bollería fina y las especias. Un poco cerrado pero con frescura, mineralidad, franqueza y profundidad. Elegante.
En boca un vino fino y equilibrado, con estilo, redondo, basado en su buena acidez y en su paso firmemente elegante, cremoso y con una burbuja muy bien integrada. Final con longitud y persistencia, quedando sensaciones de frutas maduras y frutos secos. Todo en su sitio y todo en armonía.
Este nuevo lote de Grande Cuvée nos ha dejado algo fríos, el vino desde luego que resulta impecable en sus formas y en su definición pero…¿dónde está su legendaria fuerza, el legendario “estilo Krug”? Se está perdiendo poco a poco, las mayores producciones son las culpables. Y el precio no baja, unos 140 euros.

otra botella , otra sensación, otro sentimiento, otro disfrute. Potencia, energía, suavidad, elegancia, finura, versatilidad.
Multiples aromas, multiples sabores, carbonico presente de forma diferente en cada trago. Nada que ver uno con el otro, excepto en que te enamora. ese es su hilo conductor. Te enamora y te marca......
No se puntuar eso

Amarillo dorado con burbuja muy fina, lenta que no forma corona. Aspecto cremoso, limpio y brillante.
En nariz aroma alto con lacteos en principio , mas tarde manzana verde, luego , de repente, bolleria recien hecha, croissant, mantequilla con mucha potencia. Gira de nuevo y aparecen los citricos con mineralidad . Enorme nariz, seria, contundente, marcando el terreno. Demuestra ya su personalidad.
Paso por boca con marcada elegancia y notable energía. Crema con carbónico perfectamente integrado y marcada frescura. Combinacion de potencia, elegancia, frescura y personalidad por encima de todo.
Es un nombre mitico, pero se lo merece.

Ya quedan pocas botellas de las antiguas...aunque la recompensa al esfuerzo de su búsqueda es considerable...sobre todo si olvidamos el precio.

El vino cada vez está mejor; pleno, redondo, perfecto. Evoluciona todavía hacia la complejidad, plagado de notas terciarias, tostados intensos, color oro viejo broncíneo; burbuja minúscula -aunque abundante aún- que le proporciona una cremosidad y un frescor en boca adictivos...

Decantado. Inicialmente poco expresivo (baja temperatura); a medida que se va calentando empieza el desfile aromático. A copa parada, frutos secos tostados y flan de caramelo; tras la agitación, miel, más tostados, orejones, flores secas y algún cítrico...
En boca, perfecto. Equilibrio azúcar-acidez único: para beber y beber. Posgusto eterno.

Una vez más, emocionante. Vinazo de talla mundial que maridó excepcionalmente con unos huevos con jamón y aceite de trufa blanca.

Gracias Paco ;-)

Totalmente de acuerdo con la valoración anterior; se percibe gran calidad, pero en estos momentos se muestra bruto, poco disfrutable en comparación con lo que puede llegar a ofrecer.

Este gran champagne se presenta de color amarillo vivo, con mucha burbujas diminuta y desordenada.

El aroma da tostados, bollería ,manzana ácida, y pieles cítricas, en donde se nota mucho la presencia de hierbas propias de la Chardonnay. Todo muy elegante y fino.

La boca viene marcada por una acidez tremenda casi me atrevería a decir que excesiva, a pesar de lo cual no puede decirse que desequilibre irremediablemente el resultado. Carbónico pequeño y muy bien integrado. Sensaciones de frescura y vivacidad con un predominio de tonos amargos Fine muy largo dejando de nuevo sensaciones amargas.

Para mi gusto personal encuentro que va sobrado de acidez lo cual le dará mucha frescura pero le quita su sutilidad y elegancia. En algunos momentos me dio la impresión de una manada de caballos desbocados atacando la boca.

No dar ninguna información sobre la fecha de degüelle.

En estas condiciones su precio lo encuentro muy caro y desproporcionado.