¿Qué es la garnacha? Diferencias entre garnacha blanca y garnacha tinta

Vinos de Garnacha

La garnacha es una variedad española de vid (Vitis vinifera). Se caracteriza por ser una variedad tardía, muy vigorosa y productiva, contribuyendo a variedades de vinos muy apreciadas en los últimos tiempos. Se suele adaptar a suelos arenosos y a suelos ligeramente ácidos. Por otro lado, dependiendo de la variedad de garnacha, que entre otras, puede ser garnacha blanca o garnacha tinta, existen diferencias sustanciales que veremos a continuación.

Sus vinos son notablemente valorados tanto por consumidores como por críticos por la frescura y notas frutales que desprenden. Pero no siempre ha sido así, tradicionalmente ha sido considerada como una variedad de vid asociada a vinos de poca calidad.

En España, la garnacha llegó a producirse en casi 120.000 hectáreas, siendo la primera variedad de vid plantada en nuestro país, cantidad que se ha reducido a 70.000 desde finales de siglo pasado. Además, a pesar de ser una variedad mediterránea típicamente española, en el mundo también ha tenido reconocimiento, aunque su cantidad se ha reducido de 400.000 a 300.000 hectáreas en los últimos años.

Esta reducción de hectáreas cultivadas es fruto de la resaca de una variedad de vid que tuvo mucho éxito hasta finales de siglo XX, y que posteriormente se la ha asociado con vinos de poca calidad debido a que era una variedad susceptible al corrimiento cuando el material no se seleccionaba adecuadamente (problema que se acentuaba con producciones altas), provocando poco cuajado o transformación de la flora en fruto.

Pero, poco a poco, después de este declive, la garnacha está recuperando su prestigio, a través de una producción más selecta y controlada en viñas viejas, otorgando vinos equilibrados con gran finura.

¿Qué diferencias hay entre la garnacha blanca y la garnacha tinta?

Diferencias según lugar de procedencia e importancia

La garnacha blanca (o grenache, grenache blanc, alicante blanca, sillina lanc, belán, rool grenache, garnatxa blanca o feher grenache) es una variedad de uva blanca de origen español, siendo la menos cultivada con respecto a la variedad tinta tanto en España como en el mundo (en España 25.000 hectáreas y en el mundo solo 40.000).

Esta variedad blanca puede provenir de una mutación de la garnacha tinta y se adapta a climas cálidos y secos, siendo producida en España principalmente en Tarragona, Zaragoza y Teruel. Forma parte de la variedad principal de las denominaciones de origen de Alella, Costers del Segre, Tarragona y Terra Alta (en esta región se ha conseguido identificar y potenciar los vinos blancos de la ribera del Ebro a partir de la garnacha blanca), y autorizada en denominaciones de origen como Cariñena, Cigales, L'Empordá-Costa Brava, Navarra, Priorato, Rioja y Somontano. Además está recomendada por las comunidades autónomas de Aragón y Cataluña.

Por otro lado, la garnacha tinta es una variedad de uva tinta originaria de Aragón (casta principal en D.O Cariñena y D.O Campo de Borja), siendo la variedad mediterránea más cultivada en el mundo, incluso en Francia y California. Por ejemplo en España, su producción data del siglo XII, y sigue existiendo aún viñas centenarias de esta clase tinta.

Su producción se extiende por toda España, principalmente en La Rioja, Navarra, Madrid, Cataluña y la zona de Levante. Además está recomendada por comunidades autónomas como Aragón, Castilla La Mancha, Castilla y León (conocida como garnacha roja), Cataluña (también llamada garnatxa tinta y usada en todas las D.O.), Extremadura, Madrid, País Vasco, y Comunidad Valenciana (conocida por gironet y utilizada en la D.O Requena). Y autorizada por Andalucía, Baleares, Cantabria, y La Rioja.

Tal vez esto sea porque la variedad tinta se adapta a cualquier zona y es más resistente a la sequía, heladas y enfermedades que la garnacha blanca, aunque ambas son sensibles.

Diferencias entre la garnacha blanca y la garnacha tinta en el racimo

La garnacha blanca produce racimos medianos, compactos, con bayas pequeñas-medianas, que cuando el racimo madura, puede tener cierto color amarillento-verdoso, característica que se transfiere al vino, otorgándole tonos más dorados. Tradicionalmente, la garnacha blanca se ha utilizado sola o mezclada, por ejemplo con macabeo, parellada o moscatel.

Al igual que la blanca, la garnacha tinta produce racimos medianos y compactos, con bayas medianas pero más esféricas, de color rojo amoratado oscuro y piel fina. Además, aporta un vivo color bermellón, más potencia aromática, con tonos a confituras y especias y buena acidez, lo que permite la crianza en barricas de roble que aportarán a los vinos un fondo balsámico, tostado y mineral.

Diferencias entre la garnacha blanca y la garnacha tinta en la sensibilidad a plagas o enfermedades

La garnacha blanca, a pesar de ser más sensible que la garnacha tinta en casi todos los aspectos, al ser una variedad de brotación tardía, las heladas primaverales no le afectan excesivamente, recuperándose con rapidez.

Ambas son susceptibles de padecer mildiú o excoriosis.

Diferencias en el vino que producen la garnacha blanca y la garnacha tinta

La garnacha blanca se caracteriza por producir vinos con cuerpo y elevado alcohol (otorgándole calidez en boca), de colores amarillos dorados pajizos, y con notas aromáticas florales y afrutadas de fruta madura suaves de acidez moderada. Suelen tener un fondo de sotobosque que les confiere originalidad. Dicha acidez media-alta, la hace una variedad idónea para mezclar con otras variedades, ya que aporta una ligera acidez al resto. En vinos monovarietales, también es apta para la crianza en barrica, debido a su buena evolución en el tiempo.

Por otro lado, la garnacha tinta (al estar más extendida que la blanca) nos da una gran variedad de vinos equilibrados, tintos o rosados con 15-16% vol. de alcohol, de color poco intenso, poco ácidos pero aromáticos, con cuerpo y carnosos. Además, a diferencia con la garnacha blanca, la garnacha tinta es apta para la crianza en mezcla con otras variedades, como por ejemplo el tempranillo. No es de extrañar que a veces a la variedad tinta se le llame “La Cenicienta de los vinos”, debido a la amplia variedad de vinos que pueden producirse, de simples a complejos. Destacan de esta variedad los vinos dulces naturales del Empordà y los vinos de la D.O. Priorat.  También vinos aromáticos rosados como los navarros y tintos de la D.O. Campo de Borja.