Cena improvisada al estilo "Los viajes de Gulliver"
Una cena sencilla pero sabrosa que podría haber salido de la imaginación de Jonathan Swift, la hice como "fin de fiesta" el día de Reyes... Aunque yo aún no doy por zanjadas las cenas navideñas... pero eso será asunto del próximo post...
Tras un paseo por el Mercado de San Antón en Madrid, sin idea de comprar nada concreto, volví a casa con unos huevos blancos de un tamaño muy grande:
Eran huevos de oca, o de ganso, que es lo mismo. Cada huevo pesaba sobre 200gr, unas tres veces un huevo de gallina. La yema es proporcionalmente más grande y más "untosa" que la de esos huevos.
Se pueden hacer fritos o cocidos (tardan unos 7 minutos según el vendedor). Yo los hice fritos, por eso de disfrutar hundiendo el pan en una yema tan grande.
El único inconveniente de los huevos de oca es que la cáscara es bastante más dura que la del huevo de gallina aunque sin llegar a ser un suplicio abrirla como el caso de los huevos de avestruz. Yo necesité ayudarme de un cuchillo para cortarla parcialmente después de golpearla con fuerza.
El huevo frito de oca, ocupaba casi todo un plato llano por lo que parece que fue buena idea acompañarlo con mini hamburguesas de Hamburguesa Nostra, casa con varios restaurantes y tiendas en Madrid y Barcelona, uno de ellos en el Mercado de San Antón.
En estos puestos venden variedad de hamburguesas: española (con jamón serrano y queso), argentina (con pimienta, comino y pimentón), ternera raza nostra (con romero, tomillo, orégano, ajo y pimienta), exótica (con pasas, piña y curry), 4 quesos (con Idiazábal, Picón, Tresviso, cabra y manchego), etc., tanto en tamaño normal como mini.
Yo me llevé mini burguers de buey de wagyu y del valle del Esla, sin añadidos, las que más nos gustan. Venden también salsas variadas, pero preferímos tomarlas sin aditamentos, si la carne es buena, no se necesitan.
Como os dije, una cena original que podría haber traído a casa Gulliver tras sus viajes a Lilliput y a Brobdingnag, con sabores tradicionales y de ejecución muy rápida.
¿Os apetece?
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en respuesta a Miryam777 Ver mensaje de Miryam777 Creo que debe decirse mojar, no untar, y desde luego, no siempre es un placer, al menos para mi gusto. De hecho las yemas de huevo de oca son muy bastas, con una textura algo harinosa.
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Yo hundo el pan en la yema, eso sí sujeto por un tenedor, que no es plan de mancharse también los dedos.
A mí el sabor de la yema de huevo de oca, me gusta más que la de gallina, más jugosa. Salvo algunas excepciones, como los huevos caseros de gallina que me traía a casa el panadero cuando vivía en Gijón.
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en respuesta a Pepeiglesias Ver mensaje de Pepeiglesias Corregido.... Y para gustos los colores!!!! Saludos