Cierra La Embajada : Una oportunidad perdida para todos
Domingo 1 de febrero. 19:46. Me entra un what : “ Con una cierta dosis de tristeza y mucha satisfacción por el trabajo realizado, os comunico, a todos mis amigos, que ayer sábado , día 31 de Enero, LA EMBAJADA dio su último servicio. Mil gracias!!!
Mentiría si dijera que me sorprendió. No me sorprendió , de la misma forma que me entristeció. Que un negocio cierre siempre es malo. Sea de lo que sea y tenga el tamaño que tenga. Además de la perdidas de puestos de trabajo que eso conlleva, además de la ilusiones rotas, deseos no alcanzados, siempre he pensado que se debe de sumar una sensación de fracaso nada fácil de digerir y asumir. Si el negocio que cierra es un restaurante , si cabe, todavía me gusta menos.
Foto del pais Viajero
Como decía no me sorprendió. No termino nunca de despegar . No acabo de encontrar su hueco o su lugar en una ciudad tan difícil (gastronómicamente hablando ) como Valencia. Tuvo etapas , la primera , balbuceante, dirigida a su entrada en sociedad. Lo probé un mediodía. Estaba lleno. Local majestuoso, precioso, en pleno centro. Se llenaba. Normal. Habia que ir. Mucho postureo, había que ver y ser visto. Eso dura lo que dura. Y dura lo que le duran las cosas a los snobs....... Poco , muy poco o nada , depende.
El siguiente paso (para mi el mejor de lejos) fue entro Vicente Patiño. En ese punto se acabó el postureo. Se enfrentó a la comida de verdad, al reto de restaurante por si mismo. Y , lo logró. Se noto la irrupción de uno de los mejores cocineros de Valencia. Ya lo creo que se noto. Pero no se puede , o por lo menos me parece tarea muy compleja , pretender dar un servicio de alta cocina para el aforo que tenía. Y , pienso, que ahí vino el fracaso. Se busco hacer grandes aforos con un enorme cocinero. Pero la comida de los eventos no tiene nada que ver con la otra cocina, con la del cliente que va a disfrutar en una comida o cena intima . Se mezclaron dos líneas que , debían de ser paralelas y nunca , por tanto , entrecruzarse. Y ese cruce acabo con la retirada de la pieza más importante de un restaurante : El Cocinero. Y eso llevo a cambios también en sala . De resultas de todo esto , volvió la indefinición. Más tarde , nuevos cambios , nuevos intentos de innovación.
Tanto cambio sin apuesta por un camino determinado no es bueno , emho, para un restaurante. Un local puede ser maravilloso , pero el local es el envolvente de algo que se debe de saber que es. Los eventos son eventos y , la exigencia gastronómica no es la misma que en un restaurante de 20 comensales. Ni la exigencia, ni la puesta en escena , ni el servicio . Si se unifica , lo normal , es que ceda mucho más el restaurante gastronómico que el de los eventos, con lo que , al final, lo mejor es quedarte con las multitudes Quizás fue ese el fallo. No lo sé , porque yo no sirvo , ni de lejos para llevar un negocio. En cualquier caso , al final, se cierra La Embajada, y , habrá que brindar por lo que fue, por lo que quiso ser , por lo que pudo ser ……. Todo es fuerzo se merece un reconocimiento y , estoy totalmente seguro que por falta de esfuerzo no ha sido. Mucha suerte........ Y gracias por los excelentes momentos vividos
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Una triste noticia para la ciudad. No llegué a conocer el sitio. Cuando estuve alguna vez barajando el ir vi que las valoraciones no eran muy positivas de una época a esta parte. Desear toda la suerte del mundo a los profesionales que allí trabajaban.
Abrazos tocayo
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Quédate, como bien dices, con esa fase intermedia. Una pena muy grande que por desgracia no es, ni será única. Al menos has tenido la oportunidad de vivir lo mejor del local. Hay más de un caso por estos lares que ha sufrido el mismo mal. Y no sé, tú sabrás mejor que yo, si para esto hay alguna medicina. Un saludo.
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en respuesta a JaviValencia Ver mensaje de JaviValencia Sin duda es triste. La ultima vez que estuve , (hara dos o tres meses, no estuvo a la altura de antes.
Un abrazo -
en respuesta a Gastiola Ver mensaje de Gastiola Me temo que no hay medicina Jose Ander. Creo que su unica oportunidad de haber sobrevivido pasaba por mantener a Vicente Patiño. En esa epoca , él y su equipo marcaron una diferencia evidente
Un abrazo -
en respuesta a G-M. Ver mensaje de G-M. Parece que esa fue la ultima intentona , pero , desgraciadamente no parace que diera resultado
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Yo creo que el alquiler que se debe pagar no puede hacerlo rentable a ningún restaurante hoy en día.
Triste noticia porque cae un buen local peruano y no hay muchos en Valencia. Espero que su cocinero habrá en otro lugar y tenga más suerte.
Quizás un Ricard Camarena + Bistro Canalla + barra de tapas tipo el del mercado... compartiendo gastos de una cocina única, servicio compartido si flojea en un sitio... pudieran aguantar algo, pero creo que el precio del alquiler se come todo.
Complicado. -
en respuesta a Abreunvinito Ver mensaje de Abreunvinito Totalmente de acuerdo contigo. Muy complicado. Por eso , tal y como ha hecho Ricard, la separación clara de cada tipo de restauración permite que los conceptos esten claros.
En cualquier caso, como tu dices, muy complicado -
en respuesta a Abreunvinito Ver mensaje de Abreunvinito No lo conozco, pero las fotos son de alucinar, así que no me extraña que la razón del fracaso sea esa, porque debían tener unos gastos fijos de espantar, pero para eso se hacen los planes de viabilidad.
LO del restaurante peruano me parece rocambolesco. -
en respuesta a Pepeiglesias Ver mensaje de Pepeiglesias Pues es que estuvo un tiempo de Perú y una parte del negocio para dar más opciones era la parte de la comida peruana: https://www.verema.com/restaurantes/111047-embajada-agregado-valencia#ficha.
La probé y merecía la pena.
Saludos -
en respuesta a Abreunvinito Ver mensaje de Abreunvinito No lo dudo, pero el ambiente debe ir acorde con la cocina. El palacio es majestuoso y la decoración acorde con el edificio, así que la oferta gastronómica debería ir a la par. Yo me veo comiendo antojitos mexicanos, pescaíto frito, ají de gallina, ni siquiera un lechazo o una fabada, y mira que me gustan todos esos platos.
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No he comido en este lugar, pero estoy de acuerdo en que el entorno condiciona el tipo de cocina y por ende a la clientela que acuda a ella y que los alquileres matan muchos negocios, pues los propietarios no se saben ajustar a lo que su local puede generar.
Un abrazo Javier.
Gabriel.
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El cierre de la Embajada como bien dices Javier es una noticia triste para Valencia. No es un local cualquiera es el antiguo palacio del Conde de Trenor en pleno centro de Valecncia. Subir esa escalinata es remontarte en el tiempo. No voy yo a discutir si con Patiño (fui una vez) toco techo gastronómico. Si que te puedo hablar de la última etapa con Nazario Cano al frente después de volver de Perú. Me gusta este cocinero y espero que no abandone Valencia porque su cocina se sale bastante de cierta globalidad que nos invade y yo he disfrutado con él y su trabajo.
En cuanto a la viabilidad del local es complicada. Si gestionar un restaurante de pequeño-medio tamaño ya se hace cuesta arriba imaginaros lo que pude ser semejante "monstruo". Como bien dices mezclar conceptos es difícil. De eventos solo no se puede vivir y de un gastronómico menos con semejante Palacio. La última etapa con los tres espacios puede que fuera la última bala en la recámara que ha tenido Alfredo en su mano para intentar seguir hacia adelante. Al final no ha podido ser y desde aquí solo puedo dar las gracias a Alfredo Bruguera (todo un gentleman) como a Nazario Cano (sencillo como pocos) por los momentos vividos.
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Una pena. Yo quise ir con uno que se parecía a ti y que decía ser amigo mío y no hubo manera. Igual se parecía tanto que decía de quedar y nunca quedaba.
Un saludo afectuoso, John Wayne
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en respuesta a kopicki Ver mensaje de kopicki De acuerdo contigo en que la labor o el intento de Alfredo es para descubrirse. hay que tner mucho valor para hacer lo que él hizo. Siempre admiras lo que no eres capaz de hacer y , yo desde luego , no hubiera sabido por donde empezar frente a semejante reto. Ademas de emprendedor , como tu dices , un autentico gentleman.
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en respuesta a Otilio Haro Ver mensaje de Otilio Haro Mal amigo era ese que se parecia a mi. Cuando lo veas dale un capón. Si quieres , un dia quedamos y me lo cuentas :-)
Una dudad tengo, tu tienes algo que ver con el pequeño Nicolas o es Constan ? Tal vez el apolineo?
Un abrazo (que no temereces y ya sabes porque) :-) -
en respuesta a Pepeiglesias Ver mensaje de Pepeiglesias Ahí tienes mucha razón
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en respuesta a Abreunvinito Ver mensaje de Abreunvinito Yo fracasé en Zaragoza porque abrí un restaurante alemán, ya sabes, salchichas, codillos, etc., pero como lo decoré muy bonito, la gente se pensaba que era de lujo y no entraban. Ruina total.
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en respuesta a Pepeiglesias Ver mensaje de Pepeiglesias pues ahora con la Merkel menos
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en respuesta a Pepeiglesias Ver mensaje de Pepeiglesias Eso es algo digno de estudio. Debe estar en nuestro adn. Yo tengo claro que si tuviera un local de esos que funcionan por masas, de corte tradicional, tipo almuerzos, comidas caseras, etc. no cambiaba ni un azulejo así se estuviera cayendo. La gente cuando ve reforma en algo de "siempre" se espanta.
En tu caso particular ese tipo de producto pues se asocia a barril desgastado en la puerta, o similar, banderines colgados de una parte a otra y así.