Tras 2 años probando reservar en este singular restaurante, logré una mesa

Tras 2 años probando reservar en este singular restaurante, logré una mesa en septiembre 2003. Todo y mis prejuicios, disfruté, aluciné, quedé encantado. Es como un cuento de hadas. No es un Restaurante, es como ir a un maravilloso espectáculo, a una gran obra de teatro, una gran puesta en escena. Servicio excelente (faltaría más), selección vinos impecable y con criterio. La degustación es incomparable (con un Remelluri blanco con barrica cque umplió correctamente sus funciones de acompañamiento), no deja de sorprender (alguna frivolidad con todas las licencias del maestro). Mesas algo cercanas y ambiente algo ruidoso. Para volver cada 2 ó 3 años. El precio que se paga vale mucho la pena con lo que se ofrece. Hay que aprovechar antes que se nos desmadre el genio!.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar