Hay días que no se necesitan demasiadas excusas para darse un buen homenaje y menos si disfrutas con una estupenda compañia, buenos amigos.
Ya hemos estado varias veces, la última además una experiencia un tanto "complicada", estaba demasiado rico el albariño.....
El local no tiene florituras, siempre lleno, gente que se ve perfectamente que no son precisamente obreros de la construcción pero desde luego que poco o nada tiene que ver con sus precios.
Se come bien, muy bien y desde luego que de caro no tiene nada.
Tampoco hay menú del día, hay producto, fresco, rico, bien servido.
Mesas de correcto tamaño, sin demasiada separación entre ellas, con buenos manteles, buena vajilla y cubertería y unas copas de prefecto tamaño. Se entra directamente al comedor, no hay barra, en la calle, un expositor nos demuestra lo que dentro podemos encontrarnos.
Nos sacan tres panes blancos, correctos, crujientes.
Sin pedir nada ha empezado el "espectáculo":
Calamares Frecos, buena ración, con su limón y sin historias raras. Muy ricos.
Jamón cortado a cuchillo de los que poniendo el plato en vertical no se escurre, jugoso, grasiento, de los que no puedo tener yo en mi casa puesto que como soy tan "simpático" no sabría pasar a su lado sin "saludarle".
Nécoras así, sin más, buena carne y buen entretenimiento para sacar de sus entrañas el máximo rendimiento.
PercebesDe tamaño más que decente, frescos a más no poder, ricos. No soy amigo yo de pedir estas historias pero ya que se ponen....
>Almejas en salsa buena ración, de tamaño medio-grande. Sabrosas, de verdad. Buen producto, muy buen producto.
Gambas plancha todo estaba rico pero éstas estaban más que eso, de rechupete, me hubiese comido yo solito toda la ración.
Llegamos al plato principal, varias ofertas pero nos decantamos por un plato que nunca habíamos tenido la ocasión de probar en su conjunto, no así por separado.
Txipirones en su tinta con merluza rebozada y huevo frito realmente estaba de rechupete, todo ello por su lado y más aún al mezclarlo. Rico y fresco el txipirón, riquísima y jugosa la merluza y co-jonudo el huevo (aunque diga Javi que él los tiene mejores. jejeje). Nos ha encantado este plato original.
Degustación de postres para compartir que consistía en:
tarta de chocolate, milhoja, helados de coco, pistatxo y mandarina, nada espectacular pero nada que objetar, postre fresco.
Para beber nos hemos decantado por un Torre de la Moreira 2011 un albariño muy rico, afrutado, a una temperatura ideal la cubitera al momento, un posgusto afrutado y "demasiado" fácil de beber. Han caido 2 botellas.
3 ricos cortaos y mi ya, más que "obligada" copita de Px.
Santos es un tío amable, simpático, muy cercano. Se ve que la clientela es habitual, la simpatiquísima ayudante de sala no se le queda a la zaga. Atentos en todo momento.
Hemos sido invitados pero no he podido quedarme con la duda de lo pagado por este pequeño festín. Desde luego que merece la pena, así no faltará clientela.
Qué pena que la batería de mi móvil haya sucumbido antes de sentarme a la mesa, volveremos a sacar unas fotos y de paso.... a darnos otro homenaje.