Tenía una comida pendiente con un amigo y me dijo te toca a tú. Le pregunte si había visitado varios restaurantes y me dijo que no conocía este local, así que blanco y en botella.
Llegue unos minutos antes que él, así que hice tiempo con un fino. Cuando el llego se pidió una caña.
Mientras ojeamos la carta, declinamos el menú pues el quería probar varias cositas.
La comida fue acompañada de agua y un valenciano que aún no había probado IMPROMPTU (20€) de bodegas HISPANO SUIZAS, el cual encontré perfecto para una comida algo larga.
En lo referido a la comida, nos zampamos:
- Pastisset de aguardiente, boniato y foiegras, creo que lo han mejorado desde que lo tome en octubre.
- Nem vietnamita de salmón tártara rúcola, creo que siempre que pienso en este restaurante, tengo en mente este plato.
- Bocata al vapor de cerdo-Pekín, me sorprendió, francamente bueno con un toque de ¿cilantro?
-Ensalada de tallarines de calamar y pepino, yogur y hierbabuena, pedimos que la sirvieran con la carne para oxigenar un poco este tremendo sufrimiento.
-Entrecote de Vaca Gallega ecológica (2 personas), para mi gusto con algún nervio. Pero muy buena.
-Espectacular melocotón Helado, cuando lo sacan a la mesa parece una pieza de fruta pelada, el adjetivo de su nombre es totalmente un acierto.
-Torrija caramelizada con helado de mantecao, rica muy rica.
Tomamos café y un licor de hierbas.
Pedimos que nos enseñaran la cocina y el restaurante. Tuvimos el placer de hablar con Ricard, y la verdad es que me pareció un hombre con los pies en el suelo.
Pagamos 107 €, el precio es alto, incluso no sería una RCP buena, a no ser que quieras probar toda la carta en una comida.