De los 10 restaurantes participantes en las jornadas de la cocina del langostino nos decidimos por este, satisfechos por la experiencia del año anterior en el restaurante Bergantín.
La ubicación no es su fuerte, en una callejuela sin demasiado encanto.
Decoración con motivos marineros y servicio amable en un ambiente familiar.
El menú constaba de lo siguiente:
-Ensalada con sepia: nada especial, mucha lechuga y poca sepia
-Tempura de ortigas de mar: la tempura amortiguaba el sabor de la ortiga, regular
-Tapa ganadora del Tapatour 2013: un langostino con fondo de pulpo a la gallega, bueno
-Langostinos de Vinaròs a la sal marina: buena materia prima pasada por la plancha, simple y efectivo
-Rossejat con langostinos de Vinaròs: muy bueno
-Helado con gelatina de gin tonic: bueno
Bebimos cava El celler del avi.
Nos gustó sobre todo el arroz y no tanto los dos primeros entrantes, la sensación es que tienen buena mano para la cocina marinera y es una opción a tener en cuenta por la zona.

Semana gastronómica del arroz en Vinaros, elegimos este restaurante recomendado por un conocido.
Se unen varios restaurantes de la zona para ofrecer un menú con precio cerrado de 30€ donde el protagonista es el rico cereal que tanto nos gusta a los Valencianos.
El local no es lo mas destacado de esta casa, pues su decoración no acabo de definirla, la sala es recogida, con no mas de 6 mesas, nosotros nos sentamos en una redonda de generosas dimensiones, con mantelería, cuberteria, copas y vajilla correctas.

El menú estaba compuesto por varios entrantes individuales y diferentes arroces a elegir. A saber;

-Almejas al vapor
-Delicias del mediterráneo ( pulpo con una base de puré de patata y pimentón )
-Calamarets a la plancha.
-Langostino de Vinaros

Todos los entrantes estuvieron excelentes, destacando una materia prima de primera.

En los arroces optamos por el Arroz meloso de bogavante y el rosejat de cigalas.Realmente buenos los dos, cada uno con el punto de cocción que le toca, cocinados en su correspondiente paella y emplatado en mesa, quedando una cantidad generosa.

En los postres optamos por, coulant de chocolate y copa de turron con cafe, tambien estuvieron ricos estos postres.

Dentro del menu incluia pan, bebida y cafe.

Bueno y simpatico servicio en sala, con la paciencia suficiente de tener una pequeñaja revolotendo por la sala cuando se me escapaba.

Realmente un acierto y queda totalmente recomendado para quien busque un lugar donde comer bien en Vinaros.

Muchas gracias por tan agradable estancia.