Cuatro adultos y una niña. A uno de los adultos le sonaba y, como estábamos cerca, allí mismo comimos.

A compartir, después del aperitivo y con pocas hambres:

Tortillitas de camarones (10€). Excelentes. Casi del nivel de Balbino.

Ensaladilla de gambas (9,50€). Normalilla.

Individuales

Dos doradas en tempura (22€). Dos doradas de ración en trozos pequeños y limpios y en tempura. Buenas. No se que pintaban las espinas de las doradas fritas y plantadas en los platos.

Tres de arroz a la marinera (30€). A ver, si uno carga un arroz de pimienta y pimentón ¿a que sabe? Pues eso. Lamentable. Una pena, se pueden hacer arroces marineros excelentes sin langostinos congelados y un cocinero con lija en las papilas gustativas...

Cinco postres que no recuerdo salvo el mio, un sorbete de manzana y ¿menta?. Correcto. Los cinco por 23 Euros.

Dos botellas de Barbadillo (20€), agua, cafés y una copa de PX cerraron una comida... eso, una comida.

Servicio, ambiente, montaje y platos más que necesitados de una puesta al día.

A los precios añadir el Iva.

Es la segunda vez que como en este restaurante y la verdad, me gusta. Me gusta bastante. Ambiente clasico, buen producto a la vista, etc. Algun fallo a la vista como ese techo caido, ya lo estaba hace 3 años, pero por lo demas, todo correcto.

Empezamos la comida en la barra, con unos claretes y unas tapas de gamba. Pasamos a la mesa, entre la barra y nosotros 4 mesas para un viernes a mediodia. Comentamos a ver como iba la cosa y como dicen todos, en agosto hemos trabajado sin conocimiento pero el resto del año... en fin, es lo que hay.

4 comensales comimos lo siguiente:

- Tortitas de camaron. De todas las que he comido, las mejores. leñe, puedes comer y comer que no te cansas!
- Gamba blanca. Eso ya sabemos que no falla.
- Ensaladilla de atún y gambas. Muy rica tambien, suave mahonesa.

Creo recordar que comimos otro entrante, pero ahora mismo no caigo.

De segundo no nos complicamos, atun, atun, atun y atun. Todos comieron ventresca menos yo, que comi cogote. Excelente!!

Para postre una tarta de chocholate espectacular, ademas de fruta.

Cafes, chupitos y a terminar la segunda botella de Marques de Riscal (creo que es lo que pidieron parar beber). Recojer las motos, tienen parking propio y un vado enfrente del restaurante, para continuar la ruta por la carretera!!!

Situado en la Ribera del Marisco, junto a varios establecimientos más, y junto a otro clásico, está este restaurantes de los que se pueden denominar de mantel, en el Puerto.

Sala clásica sin contacto con el exterior, decoración ídem, con réplicas de pinturas clásicas (por ejemplo la Fragua de Vulcano) mesas ligeramente juntas, aunque no fue problema para una comida al mediodía de un lunes, al estar solo ocupada nuestra mesa con 2 comensales y otra con cuatro. Vestimentas de las mesas bien y cristalería discreta.

Optamos por el menú que constaba de.

Aperitivo de croqueta de marisco, con unas patatitas fritas encima, que hacia un buen rato que habían abandonado la sartén.

Un plato tipo fuente, presentado todo junto: una lamina de jamón denominado 5 J ¿?, dos laminas de mojama; pudding de cabracho, unas especie de pisto con una anchoa en salazón encima, atún mechado, ortiguillas y un trozo de piña con dos salas alrededor dulces una de color salsa americana y otra de color verde. No se su composición pues a el camarero le note que claramente no estaba para dar explicaciones. Todo estaba a un nivel casi aceptable solo

De plato media dorada de ¡tipo ración¡ a la salsa de tipo Sherry: aceptable.

Sorbete que no supe de que.

Postre con un surtido: tocino de cielo, tarta de almendra, helado de pasas y otra trocito de tarta de “no se que”.

Cafés.

En cuanto al vino, carta clásica , con precios altos, tomamos Terras Gaudas 2008(22 euros), que no dieron a probar y eso si pusieron una cubitera sin pedirla.

Malo, malo nada, de destacar nada, no creo que repita.

Precio total 96 euros.

Situado en la zona de tapeo del Puerto de Santamaría, este restaurante es uno de los más conocidos de la zona. Manejan muy bien la materia prima (especialmente los frutos del mar) y el servicio es enormemente profesional. Buenísimo el jamón, las ortiguillas de mar y el bogavante. Mejorable la tortita de camarones. La carta de vinos, más que aceptable y el servicio bastante bueno (copas decentes pero también mejorables).

Un restaurante situado en pleno centro de la Ribera del Marisco, donde se concentran los mejores sitios para tapear de El Puerto de Santa Maria. Muy buen jamón ibérico (5J), buen marisco (tomamos un excelente bogavante como plato principal) y buenos pescados de la bahía gaditana. Atención en mesa muy profesional. No pude estudiar la carta de vinos. Copas simplemente correctas. En definitiva, un sitio para ir a disfrutar de muy buena materia prima en un lugar agradable.

Situado en pleno casco antiguo de la ciudad en una zona típicamente marinera como es la llamada Ribera del Marisco junto al río Guadalete. Su cocina está basada fundamentalmente en los productos de la bahía gaditana. Pescados típicos como la lubina, dorada, acedías, calamares, o mariscos como gambas blancas, langostinos, bogavantes, cigalas o almejas que podemos ver en el expositor de la entrada principal, totalmente frescos y recién pescados. Entre las distintas especialidades podemos encontrar además el delicioso jamón ibérico, así como la repostería totalmente casera. La bodega merece ser destacada ya que cuenta con vinos de la mejores cosechas, españolas. Decorado con el estilo típico andaluz. Merece destacar la atención del personal, impecable. Precio medio 40 euros.