Enigmatico es como puede seguir abierto (desde hace 30 años), meson en la primera planta de una casa familiar en mitad de ninguna parte, no se me ocurre ningún motivo para desplazarme especificamente a comer a a este lugar. Un jardincito, y unas brasas a la entrada que son promesa de carne excelente ( pero se quedo en promesas), comedor bien vestido, y servicio correcto (lo que habiendo dos mesas ocupadas...), buen producto pero a precios de navajero, casí 49€ por una ración de almejas, no se yo, dos chuletones aceptables, pero que en ningun caso justifican desplazamiento alguno, nada destacable, ensalada buena, pimientos de padron, postres industriales, cafes, y dos gin-tonic (bien hechos), en cuanto a vinos lleve un "unico" del 2000, y no ojeamos la carta aunque en las vitrinas estaban los sospechosos habituales de rioja-Ribera, en total con el impuesto revolucionario del pan casi 200€. Por 65€ por cabeza, una RCP flojita, flojita...para no volver NUNCA.-