Para probar...
Fuimos a comer con idea de pedir un menu degustacion y asi probar la comida coreana ya que nos habian hablado bien de este escondido restaurante. Al ser mediodia tenian un menu del dia po 9,90 que nos parecio que iba a cumplir nuestras expectativas y asi nos lo indicó el amable camarero coreano que nos atendio y nos explico en un pobre español los platos.
Vajilla por encima de lo normal y originales palillos de acero.
Decidimos compartir todo y los platos fueron (algunos los pongo en castellano porque no anoté el nombre en coreano):
- Tortilla de marisco y verdura. Una mezcla de tortilla de camaron y pizza. Muy rica. recien hecho
- Empanadillas de verduras (Mandu). Riquisimas. 6 mini empanadillas con una masa finisima y crujiente. Creo que son como gyozas que luego gratinan al horno
- Tallarines de batata con verduras. Fidos de cristal. LO mas flojo. Ademas con exceso de glutamato lo que nos dió mucha sed
- Bibimpab. Es un cuenco de piedra que viene caliente con arroz, verduras, carne. Le añadieron en la mesa una salsa que nosotros pedimos picante (auqnue no picaba demasiado). MUy rico
Decidimos completar fuera del menu con Kimchi que es el acompañamiento mas tomado en Corea . Una especie de col fermentada y picante. No me gustó mucho.
Aunque el menu incluia bebida pedimos un Marques de Riscal verdejo a 13 euros ¡¡ servido en cubitera muy fresquito y con unas decentes copas que muchos restaurantes cutres nacionales quisieran tener.
Terminamos con 2 cafes.
La cuenta ascendio a 30 euros y tuvieron el detalle de descontar 4 euros del vino por estar inlcuida una bebida en el menu.
El camarero incluso salio a la puerta a despedirnos interesandose por lo que nos habia parecido.
En resumen estupenda experiencia