Fueron los mejores de Santa Cruz y se valora el esfuerzo del nuevo equipo.
Tengo muy buenos recuerdos de La Cazuela y de las dos últimas veces, con el cambio, se puede decir que siguen siendo una referencia.

La carta de vinos sí es buena, con el cariño que se merecen los vinos de la zona.
La comida va a la par. No es fácil encontrar un restaurante con níscalos de Tenerife..

Restaurante céntrico a la capital, algo estrecho (al menos la zona exterior), con servicio amable y correcto. Comida con pequeña carta y propuestas de pizarra. Nuestra elección, de valoración tibia (simplemente correcta). El vino está repartido por el local, y lo llevan a temperatura con una maquina enfriadora que tampoco parece ser la solución (tuvimos que enfriarlo algo más posteriormente). De aperitivo pedimos fino, que nos sirvieron sin mostrar la botella. La carta es demasiado previsible, en su mayoría D.O. archiconocidas. Cambian a copas Schott sin reclamarlo, aunque sólo si pides ciertos vinos. Decantaron, pero no hubo seguimiento de servicio a posteriori. A mejorar. Aun así, lugar agradable (30€; sin vino).