Local casi clandestino

Buscando en Verema un restaurante en Cuellar donde comer después de visitar dicha localidad, de gran interés monumental, veo que a pocos kilómetros existe un local que sale muy bien parado tras la visita de dos ilustres de este foro, por lo que no me lo pienso dos veces y llamo para reservar. Llegamos al bar antes de la hora y mientras nos preparaban la mesa tomamos en la barra una copa de Rueda acompañada de un delicioso verdel en escabeche. Al poco sale el dueño, Santos, y nos conduce a la mesa del fondo de su diminuto comedor, nos enciende la televisión y les deja el mando a distancia a mis hijas para que vean lo que quieran. Por si teníamos alguna duda, ya desde el principio queda claro que estamos en un local atípico. No hay carta ni de comida ni de vinos, por lo que decidimos ponernos en manos del dueño, que con nuestro permiso nos saca lo que le parece:
-Patatas a la importancia: nada más las que me hacía mi abuela se aproximan a éstas
-Croquetas de atún: muy cremosas y de buen sabor
-Escabeche de palometa: con el toque exacto de vinagre para no enmascarar el sabor del pescado
-Carrilleras de cerdo escabechadas: buen sabor, aunque cortas de cocción para mi gusto
-Revuelto de champiñones: aunque lo sirven con el huevo totalmente cuajado, estaba muy rico, con los champiñones plenos de sabor
-Flan de huevo: cuando un postre como éste se elabora con huevos y leche de calidad el resultado puede ser, como fue el caso, sublime
-Yogur natural con confituras: elaboran ellos mismo el yogur, utilizando leche fresca, que acompañan de confituras de membrillo, calabaza y tomate verde.
Para mis hijas les pusieron arroz blanco con tomate natural y huevo frito. Lo probé y estaba a la altura de todo lo demás. De postre, para ellas, unos helados industriales.
Para beber Santos nos sugirió varias vinos, decantándonos al final por un Balorio 2007, tinto del Bierzo que no conocía y que resultó una buena elección.
Acabamos la comida con un par de cafés, de un nivel que ya quisieran muchos restaurantes. La cuenta no llegó a 70 euros, incluyendo la botella de vino y la consumición inicial de la barra.
En resumen, una experiencia muy gratificante que habrá que repetir.

Recomendado por 1 usuario

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar