Pues si , no se puede juzgar a la primera....

Este comentario es sobre unas jornadas que ofrece el hotel López de Haro, en su restaurante, aunque quizás hubiese quedado mas propio reflejarlo como tal, he preferido comentarlo como si fuese en el Baluarte, ya que el propio Oscar García dirigió la cena, y puesto que en su día no Sali muy satisfecho de mi primera visita en Soria, este comentario es sobre el mismo cocinero.
Es un menú cerrado con vinos, si no recuerdo mal 100€.
Puerro asado, mantequilla de Soria acida y trufa negra y alcaparras, con champagne taittinger Folies de la Marqueterie, antes una croqueta de rabo de toro deliciosa, y el puerro no se quedó atrás, mucho sabor.
Tubérculos con trufa y jugo aromático de jengibre y apio nabo (pimientas, lemon Grass), regado con blanco Chivite 123 fermentado en barrica.
El mismo blanco para el pate de pichón con solomillo de corzo, setas de temporada, jugo de caza y trufa de invierno, los pases llenos de sabor y técnica.
También con el mismo blanco pasamos a una deliciosa cuajada de oricios, huevo y trufa, huevo batido al baño maría con trufa, caviar Belluga 8 años, cuchara de arriba abajo, sin mezclar, delicioso.
Langostino de tierra (medina del campo), los marcan en plancha, poco, acompañado de una emulsión de alga kombu y los corales del langostino, vegetales marinos(algas) y acabado con miso y como no, con un poco de trufa rallada, aquí nos sacaron el tinto de Chivite Legardeta Syrah, yo preferí seguir con el anterior blanco, muy bueno el plato.
Guiso de caza menor, pasta wonton, jugo del propio guiso, crema de tupinambo y aire de champiñón, y por supuesto trufa, aquí si fue mejor el tinto anterior.
Tarta de queso de Oncala, trufa y vainilla, con la vendimia tardía de Chivite, deciros que pedí un poco más, sabor a queso, ese punto salado que me chifla.
Trufal dulce con helado cremosos, recreando un campo de flores, crema de almendras, tierras de cacao y remolacha, crujientes de boniato y rebozuelo, kamote, merengue de trompetas de la muerte, un remate excelente, con vendimia tardía.
En resumen, una bonita velada , esto demuestra que con una sola visita a un restaurante no se hace cátedra , fui a Soria a las jornadas de setas y hongos , y no Sali muy contento , viene Oscar a Bilbao , sin estar en su casa , aunque este hotel y su restaurante lo ponen todo de lujo , pero no es lo mismo , y me encanta su cocina , por eso hay que dar mas de una y dos oportunidades , eso si a la tercera me planto .

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar