Restaurante ubicado en el hotel Silken Ciudad de Vitoria. Presenta un menú de entre 17 y 20 EUR con un entrante, un plato principal y un postre, a elegir cada uno entre una variedad amplia. La calidad de los platos es muy buena, propia de la zona. El servicio muy profesional. La carta de vinos es justa, pero tratan en producto con buenos modos. El entorno es muy agradable. Se puede rematar la comida en un piano bar con gran variedad de licores de nivel y con la misma calidad en el servicio. Mi única objeción la pongo en las copas de champán, que desmerecen mucho todo lo demás. No cuesta tanto tener unas copas apropiadas igual que para el resto de vinos. El precio es curiosamente barato para un local con tanta clase.