Hace ya tiene que ha cerrado. El chef ha abierto uno nuevo en Benifaió con el nombre de Ma Casa.
El local creo que lo ha cogido Homenaje Taberna Gourmet.
En una zona con bastantes restaurantes por metro cuadrado y, por tanto, con gran competencia sobre todo en la opción de menús a medio día, se ubica este local pequeño, con sala en forma de tubo con una barra en la parte casi final de la sala para el almacén de destilados y tener el barril de cerveza, única opción, además de descartar cualquier fino, manzanila y similares.
Decoración con mesas y sillas de madera, tonos luminosos. Servicio en sala con muchos agobios de horario para que no cierre la cocina, situación fatal para nosotros y un comensal se incorporó con todo pedido y los dos primeros entrantes servidos o corríamos el riesgo de no comer nadie, a pesar de que estaba a menos del 50% de ocupación.
Comida para cuatro, con cervezas previas, aceitunas arbequinas y aceite de la cooperativa de Segorbe (según refieren, porque va en aceitera de casa), por cortesía del local; muy interesante. Un buen pan loncheado para acompañar.
Agua sin gas x 3 y un tinto, Gamonal 2015, un mencía agradable que sorprendentemente llegó hasta el final de la comida.
La carta de vinos no es muy amplia y de corte más bien clásico.
Dispone de un menú Ca Duart corto (1 entrante, 1 segundo, 1 postre) por 13.90€; versión larga (3-1-1) por 20€. La otra opción es el menú Carpe Diem en versión corta (1-1-1) por 21.90€: la versión larga (3-1-1) por 30€. Coinciden pocas opciones en los dos tipos de menú.
Optamos por la larga de Carpe Diem y reforzamos con otro entrante aparte (coca) y quedó así:
. revuelto de erizos de mar: muy de sabor a mar, aunque las sensaciones del erizo estaban un poco perdidas.
. ortiguillas de mar a la andaluza (es decir, con el rebozado de los pescaditos): ridículas de tamaño (aunque se reducen mucho al cocinarlas) hasta el punto de parece unas migas de rebozado sin más. No debían de ofrecerse en estas condiciones.
. huevo trufado con espuma de patatas, migas y alcachofas: plato muy conseguido en sabor, textura y unión de los elementos integrantes.
. coca de caballa ahumada en casa con berenjenas a la llama: plato extra y amplia ración (al ser fuera de carta) sobre una tosta demasiado débil para cogerla con la mano que es lo que te pide el cuerpo, bien dotada de filetes de caballa y berenjena con buen sabor y ahumado.
Se quedó fuera la opción del foie micuit en los entrantes y de los segundos el jarrete y el rossejat de fideos con quisquillas. Elegimos de segundos, dos de cada:
. lenguado relleno de douxelle cremosa con salsa yodada de cañaillas: referido como bueno.
. gazpacho de caza menor con boletus y caracoles: servido en paella a compartir, buena ración, sabor correcto, bien de tropezones y buen punto de la pasta.
Postres compartidos:
. 2 x torrija de fartó con horchata, nísperos caramelizados y helado: de presencia fálica con sus dos bolas de helado, resultó más dulce de lo esperado.
. brownie con cacahuetes, cremoso de chocolate y helado de haba tonka: curioso helado; la textura del brownie demasiado seca.
. fresas con chantilly y migas de hojaldre: correcto
Cafés buenos. Sin otros extras.
Rápida cadencia de platos, buen servicio en sala, bien el emplatado y el menaje. Copas correctas.
Me pareció un local más, sin fallos pero sin dejar huella. Hay mucha competencia en este planteamiento y en esta zona.
Estaba por la zona y acordeme de las reciente valoración aportada y ahí que me fui a experimentar.
Habiendo andado toda la calle ciscar (desde antic regne) y curioseando las aperturas y cierres de locales, me tope con mi destino y la verdad es que invita a entrar..
Conté diez mesas en el comedor principal, atendidas por un camarero diligente y atento, pero con esos andares apresurados que tan nervioso me ponen cando estoy sentado a la mesa, especialmente si voy solo.
Dos opciones de menu, cada una con la posibilidad de hacerlo corto o largo (1 o 3 entrantes)
Menú que no indica nada de bebida por lo que se deduce que no va incluida y tampoco aclara si el pan esta incluido ni el IVA . Finalmente el pan no estaba incluido y el IVA sí.
Cutre carta de vinos, dos folios cogidos con una pinza en un portafolios. Folios bastante manoseados ya y con falta de buena parte de las referencias, que por otra parte no eran nada del otro jueves. Casi nula opción de vino por copas, (rioja y ribera cosecheros y verdejo). finalmente me quede con el agua
Cortesia de la casa creo que eran chips de tupinambo y aceitunas perdigon las llamamos nosotros (esas diminutas)
Entrantes:
Crema de calabaza con castañas caramelizadas. Muy buena presentación, sabor y bien de temperatura y textura. Esto empieza bien
Necora con crujiente de puerro y un salsa de no recuerdo que: El crujiente (unas tiras finas de puerro frito) tapaba el resto de sabores. La salsa no fui capaz de descifrarla pero dejaba unas notas acidas al final que no terminaban de cuadrar.
Huevo trufado con espuma de patata, setas de cardo y migas (y cebollino): Muy bueno, lástima del cebollino que enmascara el resto, pero si consigues apartarlo el plato es muy redondo. La trufa no está muy presente, pero el conjunto esta muy bien.
Rosejat de calamares con ajos tiernos: Presentado en paellera, ración inmensa. No me gustó nada, ni el punto de cocción, ni de sabor. Me dio la sensación que se habian quedado sin caldo y le habian echado agua, muy my flojo de sabor.
El punto de cocción de los fideos tampoco era de mi gusto y ademas muy desigual dependiendo del lado de la paella del que lo comieras, como si el fogon estuviera desnivelado o la paella abombada por un lado.
Calamar gomoso, del que tienes que quitar "hilos".
Y si eso no fuera sufciente, todo el rossejat iba cubierto de cebollino.
Parece ser que el cebollino esta sustituyendo el otrora omnipresente perejil...
Postre: Crema brule de chocolate y avellanas. Flojo
Sefgun me comentaron el huevo trufado y el rosejat son las especialidades de la casa, el huevo puede quedarse, pero el rosejat a mi no me ha convencido nada como carta de presentación del local
Sobre el papel, nos pareció atractiva la propuesta del menú mediodía que ofrecían bajo el auspicio del certamen Valencia Cuina Oberta (VCO), así que decidimos probar.
Ubicado en el zoco gastronómico del ensanche capitalino, viste el local de tonos claros y presencia de madera que viene a certificar la reforma reciente comentada en valoraciones previas. Muy a la tendencia decorativa actual... para muestra un botón.
Bajo una atmósfera despejada y tranquila ocupamos una de las mesas que quedan a la derecha de la entrada y donde uno de los comensales debe sentarse sobre un banco corrido, cosa esta que no termina de convencerme sea cual fuere el local que lo tenga así establecido.
Unas aceitunas de la variedad arbequina y unos chips de boniato acompañados de una ronda de cervezas mientras decidimos el principal dentro de las posibilidades que brindaban. Así quedó la cosa:
Ceviche de Corvina con Melocotón y Granada. Servido al centro. Sin alardes ni magia especial, se limitaba a cumplir con honestidad el papel telonero asignado. Íntegro.
Calçots a la Brasa con Salsa Romescu. Un par por cabeza que posaban ya "descamisados" en el plato al lado de una pincelada de la salsa. Sin objeción, excepto que no me veo comiendo este manjar de forma delicada pues lo asocio a situaciones con ambiente... digamos más desenfadado. Incómodo.
Huevo Trufado con Espuma de Patatas y Setas de Cardo. La mano ganadora de cualquier menú aparezca o no el jamón en la combinación. Buena ejecución con ese punto crujiente de las migas por encima que daban juego. Póker.
Merluza con Salsa de Hervido Valenciano y Piparras. Andaba titubeando con los principales cuando el camarero me lo aconsejó. Y yo que me reconozco de veneración fácil hacia el pescado... allí que fui a parar. Superada, en este caso, la actriz principal del plato por la interpretación del supuesto secundario, que se enfundó el papel de protagonista en una cuidada puesta en escena. Afán.
Probé el Jarrete de Ternera que pidió la siempre carnívora Hambrebuena. Tierno y gustoso que se acompañaba de un puré de calabaza y unas cebolletas glaseadas. Tiene un ojo infalible.
Para limpiar las papilas presentaron unos voluntariosos Gajos de Mandarina al Moscatel y dado que ofrecían dos tipos de postre zanjamos el problema pidiendo uno de cada y compartiendo ambos. Destacable el acertado Flaó Ibicenco por su ligereza, quedando por encima de la Tartaleta de Chocolate Fondant cuya apariencia ya no enamoraba.
En cuanto a la bebida... continuamos con cervecita. Muy buen y variado pan con el que se acompañó el menú.
Servicio eficiente y amable.
En resumen me pareció una opción más dentro del panorama de la zona, en la que se atisban intenciones y maneras pero que no cristalizaron en flechazo en mi caso... y es que me han pillado en momento que ando al acecho del cupido gastronómico.
Nota: El precio reflejado es el del menú VCO que no incluye bebidas y la RCP puntuada en base al mismo.
Tartaleta de Chocolate Fondant
Flaó Ibicenco
Jarrete de Ternera
Merluza con Salsa de Hervido Valenciano y Piparras
Huevo Trufado con Espuma de Patatas y Setas de Cardo
Calçots a la Brasa con Salsa Romescu
despues de haber leido la ultima critica de este rest.hecha por el
insigne forero kopickiy viendo el menu que tenia dije ahora le toca.
1ºlas tapas,aceitunas arbequinas,chips de boniato y un salmorejo con
cerezas y aceite de albahaca:bien.entrantes:tataki de atun empanado
en sesamo con ajo blanco,tres tajaditas de unos cinco cm.con la
textura un poco blanda,seria por el marinado,pero estaba bueno,navajas
con salsa yodada,jenjibre y ralladura de limon,buenas,huevo trufado
con espuma de patata,mollejas de ternera y migas,un plato que ya habia
probado en otro sitio y que estaba resulton,bueno.plato principahabia cuatro para escoger y muy tentadores todos,escogi el rossejat de
fideos finos con dos trozos de cabracho dos vieiras peq.y ajos tiernos
esto lo sacaron en una paella que cuando la vi les dije:donde vais con
eso,que es para mi solo.y me dijeron si no se lo acaba nosotros aqui
tenemos unos "tupper" para que se lo lleve a casa,lo agradeci pero
no lo acepte.esa fidegua olia mas que sabia o sea que se quedo corta de sabor,regularcin.prepostre fruta de temporada con infusion de
citricos,menta y helado de ralladura de limon,refrescante y limpiador
de sabores,bueno.postre:brownie con nueces de macadamia cremoso de
choc.y un muy buen sabor del helado de haba tonka.
petit fours:unbizcochito de pistacho y una galletita de choc.y
nueces un poquito quemada.bebida:un vermut yzaguirre reseva,una copa
de vino b. las dos ces,una infusion de menta natural.
en conjunto y por el precio pagado,muy recomendable.
Ubicado en la calle Císcar y rodeado de las propuestas mas variopintas (japonés, tabernas, italianos, barras) se encuentra Ca Duart. Recomendado por varios amigos que saben del comer y del beber nos acercamos por allí un sábado después de ver la mascletá. Ocupa lo que antaño era un restaurante Chino si no ando equivocado. Al local rectangular, estrecho, oscuro y con una distribución algo extraña le hace falta una reforma clara que lo modernice y armonice con la cocina que sirven. Y por lo que me pareció oír en ello están.
El menú de ese día al precio de 15e "iva no incluido" se llamaba " Masclet" y había que elegir entre dos entrantes de cinco y un segundo y un postre de cuatro. Cada plato extra solicitado tenía un suplemento de 2e. Curiosa propuesta que aprovechamos pidiendo un entrante más. Así se desarrolló la comida:
Menú
. Zamburiñas a la gallega con crema de calabaza: El mejor entrante. La calabaza está de moda y la poco habitual Zamburiña nos sorprendió.
. Tartare de atún con jengigre, aceite de soja, manzana verde y piparras: Correcto. Eché en falta algo más de chispa al acompañamiento.
. Espuma de patata con huevo trufado, setas de cardo y migas: Otro plato a tener en cuenta. Potente.
.Rossejat de fideo fino con pescado de roca, cigalas y ajo tierno: Llegamos un poco hartos de los entrantes pero no quedó nada. Acostumbrado y algo cansado de los arroces melosos de los menús de mediodía era el plato a pedir sin duda. Notable alto.(la foto no le hace justicia).
Los otros principales a elegir para que os hagáis una idea: carrillera, marmitako de bonito del norte o arroz de pato, setas y caracoles.
Postre
.Tatín de manzana caramelizada con crema de vainilla
.Creme brulee de chocolate y avellana
Correctos, en comparación con la comida salen perdiendo claramente.
Vino
Ante la ausencia de un cava solicitado tomamos un correcto Temps de Flor de bodegas Sumarroca bien servido y con copas bastante decentes. La carta es corta pero hay alguna referencia interesante.
Pan de mucha calidad de varios tipos acompañado de AOVE Serrana de Espadán de Jérica con sobrecoste de 1.50e más iva por persona. Dos cafés y dos "chupitos" invitación de la casa cerraron la comida.
Muy buen servicio pese al lleno del local y que la mayoría de comensales llegarán todos a la vez (la mascletá).
Cocina de mercado claramente mediterránea la que ofrece Carlos Duart donde sobresalen los arroces secos en lugar de los melosos que es lo que se oferta en casi todos los menús. Con unos retoques en el local y en el tema del Iva no incluido mejoraría en el escalafón. Nos gustó la propuesta y volveremos porque hay un arroz de pato mudo en la carta al que tengo curiosidad. Un restaurante a seguir.
Rossejat de fideo fino con pescado de roca, cigalas y ajo tierno
Espuma de patata con huevo trufado, setas de cardo y migas.
Zamburiñas a la gallega con crema de calabaza
De nuevo visita a Ca Duart, sabado a mediodia. En este caso nos decidimos por el menú.
Entrantes para compartir:
-calçots con salsa romescu.
-espuma de patata con huevo trufado (ya un clásico que no defrauda)
Plato principal:
- rossejat de fideo fino.
Postre:
- fresas con nata y tierra dulce
- mousse de nutela a la catalana (delicioso)
Agua, dos cervezas y un gin tonic de Tanqueray.
precio total 33 euros.
Con mi chico exploramos la ciudad buscando sitios que cogen cheques gourmet, que le dan en el trabajo. Por casualidad nos topamos con este sitio y la carta tenía buena pinta y entramos.
Lo lleva una pareja joven que realmente ama su oficio, y eso a mi me encanta. Nos gustó la degustación de panes caseros (pan de pueblo, pan con aceitunas, etc) y su aceite riquísimo... la carta muy inventiva y todo bastante rico (el langostino con pasta de hilos es lo que menos me gustó, un poco grasiento, pero a mi chico le encantó), todo hecho con gusto y delicadeza; la chica super atenta... Nos gustó mucho.
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